Resumen
Este ensayo pretende problematizar dos posturas teóricas que, en la década de los noventas, construyeron una serie de relaciones entre la obra del artista Marcel Duchamp y el filósofo Immanuel Kant. Esto, con el propósito de formular un estado de la cuestión sobre el cual trazar una tercera vía, al afirmar una condición política que los articula. Esa condición política se desprende del pensamiento de Hannah Arendt, quien la interpretó en Kant como
un “sentido silencioso”. Dado que Arendt no dedicó una sola palabra al artista francés, este escrito asume el deber de esos desarrollos, tomando en consideración una serie de fuentes que posibilitan ver el vigor político en la obra de Marcel Duchamp, y que lo hacen susceptible de relacionarse con ese “sentido silencioso” que postula Arendt al respecto de Kant.