Arnold Krumm-Heller y el esoterismo
en América Latina
Arnold Krumm-Heller and esotericism in Latin America
Mariano
Villalba
Universidad de Lausana, Suiza
Recepción: 2 de julio de 2018/Aceptación: 13
de agosto de 2018.
doi: https://doi.org/10.15517/rehmlac.v10i2.33355
Palabras clave
Arnold Krumm-Heller; esoterismo;
América Latina; Revolución Mexicana; Fraternitas Rosacruciana
Antiqua.
Keywords
Arnold Krumm-Heller; esotericism; Latin America; Mexican Revolution; Fraternitas Rosacruciana
Antiqua.
Resumen
Arnold Krumm-Heller (1876-1949) fue
el primero de los ocultistas en realizar una producción original de las
corrientes esotéricas modernas en relación con los temas y problemas
específicos de la historia mexicana y latinoamericana. Su Fraternitas Rosacruciana Antiqua fue la mayor
organización esotérica de América Latina, con la cual se relacionaron –en la
época– militares, artistas e intelectuales de la región que compartían una
preocupación por construir nuevas identidades culturales para las naciones
emergentes del continente. Este artículo ofrece una reconstrucción y un
análisis histórico-cultural de las actividades políticas y esotéricas de Arnold Krumm-Heller durante la
Revolución Mexicana en base a fuentes de archivo de Estados Unidos, México,
Francia, Alemania y Suiza. En el marco de una compleja interacción de intereses
imperialistas en México, Krumm-Heller construyó una
nueva delimitación de lo que se comprende por “esoterismo occidental”
incluyendo a Latinoamérica y agregando tradiciones autóctonas al bagaje
europeo.
Abstract
Arnold Krumm-Heller (1876-1949) is the first occultist to produce an
original work of modern esoteric currents in relation to the specific themes
and problems of Mexican and Latin-American history. His Fraternitas
Rosacruciana Antiqua was the biggest Rosicrucian
organization in Latin America, in which Latin-American militaries, artists and
intellectuals shared an interest in building new cultural identities of the
emerging nations in the continent. This article offers a reconstruction and a
cultural-historical analysis of Arnold Krumm-Heller’s political and esoteric
activities during the Mexican Revolution based on archival sources from the
United States, Mexico, France, Germany and Switzerland. In the framework of
complex imperial interests in Mexico, Krumm-Heller constructed new limits to
what is known as “western esotericism” including Latin America and adding local
traditions to the European ones.
Introducción
Arnold Krumm-Heller (1876-1949) fue
el primero de los ocultistas en realizar una producción original de las
corrientes esotéricas modernas con relación a los temas y problemas específicos
de la historia mexicana y latinoamericana. Su Fraternitas Rosacruciana
Antiqua, fundada hacia 1927, fue una organización
pensada para operar únicamente en países de habla hispana y portuguesa –proclamándose
“Soberano Comendador para España, América Latina, Antillas y Filipinas”–, con
la cual se relacionaron en la época importantes militares, artistas e intelectuales
latinoamericanos que compartían una preocupación por construir nuevas
identidades culturales para las naciones emergentes del continente. A pesar de cierta
atención académica dedicada a este influyente personaje del esoterismo
latinoamericano en los últimos años[1], poco
es lo que se conoce aún con certeza, entre otras razones por el carácter
fragmentario e internacional de las fuentes, los diversos relatos construidos a
lo largo de los años y debido al carácter secreto de sus actividades por parte
doble en tanto esoterista y espía.
La intención del presente artículo es ofrecer un panorama
del trayecto biográfico de Arnold Krumm-Heller
hasta ahora desconocido. Y se va a realizar a partir de fuentes de archivos de
Estados Unidos, México, Francia, Suiza y Alemania, dejando planteadas una serie
de problemáticas en cuanto al campo de estudios sobre el esoterismo occidental mediante
un análisis histórico-cultural de su obra durante la revolución mexicana[2]. En
primer lugar, presentaremos cuáles fueron las influencias europeas y corrientes
del esoterismo moderno que Arnold Krumm-Heller
introdujo en Latinoamérica. Reconstruiremos y abordaremos luego sus actividades
políticas y esotéricas en cuatro períodos: la campaña maderista (1905-1913),
sus actividades en el movimiento constitucionalista (1913-1917), su misión como
legado militar en Alemania (1917-1920) y la conformación de su FRA (1920-1936).
Su organización esotérica fue montada en Latinoamérica utilizando su rol como
representante comercial y militar de los intereses imperiales alemanes en
México. Y se hizo durante el proyecto cultural del gobierno de Álvaro Obregón
de 1920-1924, que buscaba una nueva identidad nacional e instalarse como
narrativa oficial de la Revolución.
En este proceso Arnold Krumm-Heller construyó una nueva delimitación de lo que se
comprende por «esoterismo occidental», expandiéndola geográficamente hacia
Latinoamérica. Y, desde el punto de vista doctrinario, agregando tradiciones
autóctonas al bagaje europeo, lo cual dependió del emergente nacionalismo
mexicano y la compleja interacción de los diversos intereses imperiales durante
la Revolución Mexicana y la Primera Guerra Mundial. Como ha señalado Marco Pasi con respecto al problema de la delimitación de lo
«occidental» del esoterismo, el concepto no surgió de ambientes académicos sino
de los propios discursos religionistas, dando lugar a
lo que Joselyn Godwin llamó la «reacción hermética»,
la aparición de personajes y grupos que insistieron en (lo que cada uno pensaba
eran) las tradiciones occidentales del esoterismo. Si bien lo que se concibe
como «oriental» es puesto en un nivel de superioridad con respecto a la supuesta
decadencia materialista de «occidente», los esoteristas
se ubicaron –en realidad y usualmente– en una posición de superioridad eurocéntrica
con respecto a las «razas» que vivían en aquellos países[3]. Esto
tendría fuertes implicancias en Latinoamérica, ya que Krumm-Heller
construyó su doctrina e institución a partir de fuertes intereses imperialistas
alemanes en México y la inclinación de algunos ariósofos
alemanes y austríacos por las culturas aborígenes y el continente americano. Al
mismo tiempo, la FRA sería atractiva para numerosos intelectuales
latinoamericanos, usualmente germanófilos, que encontraban en el espiritismo y
la teosofía alternativas culturales frente al imperialismo «materialista» de
los Estados Unidos[4].
Arnold Krumm-Heller como puente del esoterismo en Latinoamérica
Arnold Krumm-Heller fue
representativo de las actividades políticas, científicas y culturales de los
alemanes en México desde la independencia. Siendo el menor de nueve hermanos,
nació el 15 de abril de 1876 en Salchendorf, cerca de
la ciudad minera de Siegen en el sur de Westfalia[5]. Su
padre Ferdinand Krumm, inspector de minas, y su
madre, Ernestine Heller,
hija de un pastor protestante, pertenecían a una familia emigrada a México en
1823 para laborar en la minería. Siendo él mismo trabajador a los 15 años, esta
actividad le dejará una profunda marca y será una constante tanto de sus
actividades científicas y políticas como espía y representante comercial, así
como en su imaginario esotérico. Su bisabuelo minero Karl Bartholomaeus
Heller había recorrido México entre 1845 y 1848 con
la intención de recolectar y estudiar plantas americanas, y publicó sus
impresiones en Leipzig en 1853 bajo el título de Viajes en México[6]. Según relató en su autobiografía, impresionado
por estas cartas decidió viajar hacia Latinoamérica, partiendo en febrero de
1893, dos meses antes de cumplir los 17años, desde Hamburgo hacia Chile donde,
vivían parientes de su padre[7].
En este país tuvo su primer contacto con el esoterismo a
través del espiritista francés Léon Denis –que viajaba
por Latinoamérica en esos años–, con quien estudió espiritismo y teosofía, y
publicó una primera revista sobre estas corrientes, El Reflejo Astral[8]. En Chile se casó con su primera esposa,
Rita Aguirre Valéry, hija de diplomáticos chilenos y –posteriormente– abrió una
clínica en Santiago[9].
Desde este país aprendió en torno al mundo ocultista francés y le escribió a Papus, quien le remitió a Buenos Aires para encontrarse con
el delegado general para América del Sur del Grupo de Estudios Esotéricos y de
la Orden Martinista, el oficial y médico del ejército
argentino Dr. Henri Girgois. El martinista
francés radicaba hacía largos años en Argentina, ocupándose de fundar logias en
este país y en otros, como Uruguay, Chile, Paraguay y Brasil. Además, se
encargaba de una «Botica y droguería del indio» en La Plata, donde vendía perfumes
y medicamentos[10].
Fue quien inició en el martinismo a Krumm-Heller,
episodio relatado en su autobiografía[11],
y quien tendría suma influencia sobre él en cuanto a su concepción del
esoterismo latinoamericano y las culturas aborígenes con su relevante obra Lo oculto entre los aborígenes de América
del Sur[12].
Tras viajar por Latinoamérica y estudiar plantas y culturas originarias, manifestó
ser iniciado por indígenas en Cuzco y tener una experiencia mística, adoptando
el nombre espiritual del dios andino «Huiracocha»,
denominación con la que sería conocido en ámbitos esotéricos y públicos. En
México estudió arqueología y mitos prehispánicos junto al importante médico-etnólogo
Nicolás León Calderón, presentando un trabajo en el Congreso de Americanistas
de México-Buenos Aires de 1910 sobre una comparación entre la astrología
occidental y los calendarios Inca y Azteca[13].
En ese mismo año participó en una «memoria científica» sobre Humboldt –junto a
otros siete científicos alemanes– a causa de la erección de una estatua
regalada por el káiser durante el centenario[14].
Según su legajo de la Secretaría de Guerra y Marina,
radicó definitivamente en el país en 1904. En la antigua calle del Empedradillo
–hoy Monte de Piedad–, en el centro histórico de la capital, tuvo su
consultorio homeopático, mientras que su residencia se emplazó en el pueblo de
Mixcoac, en aquel entonces a las afueras de la capital, actualmente un barrio
de la Delegación Benito Juárez del Distrito Federal[15]. En
1906 tuvo su primera misión política importante, cuando Porfirio Díaz lo envió
como auxiliar del general Jerónimo Treviño a Europa a estudiar las minas de Essen, en ese entonces la ciudad minera más grande del
continente. Allí se entrevistó con el director del consorcio empresarial más
grande y poderoso de Alemania surgido en esa ciudad, el Grupo Krupp, productor
de las armas de todas las guerras europeas hasta 1945[16]. Desde
entonces, diplomacia y ocultismo serían dos ocupaciones inseparables y
complementarias, utilizando las redes políticas para armar su organización esotérica
y los contactos ocultistas para su tarea de propaganda maderista y carrancista.
El general Treviño lo encomendó a París a estudiar con Papus,
con quien tenía contacto, ya que se conserva entre sus papeles personales la
dirección del general mexicano en Monterrey[17]. Krumm-Heller estudió en carácter de interno en el Hospital
de la Salpêtrière en París, donde trabajaba Papus, con el neurólogo Jean-Martin Charcot,
bajo el cual dice adquirir “su doctorado en Ciencias” y publicó Mis observaciones en los Hospitales y en la
cabecera del enfermo[18].
En esta ciudad participó tanto en el importante Congreso
Masónico y Espiritualista del 24 de junio de 1908, dirigido por Papus –el cual tenía como objetivo federar a todas las
asociaciones ocultistas–, como en el convent maçonnique, que buscaba unificar todos los sistemas
masónicos irregulares que circulaban por Europa[19]. Fue
precisamente en París, meses antes del congreso, donde recibió las cartas
patentes de los principales ocultistas de la época para establecer
instituciones esotéricas en Latinoamérica. El 13 de marzo Papus
lo nombró «Délégué Genéral pour le Chili, Pérou et Bolivie» de la Orden Martinista,
reemplazando en esto a Girgois en Buenos Aires. Y dos
días después recibió otra patente de Theodor Reuss y
Henry Kleincomo «Gran Representante General para
México del Soberano Santuario del Antiguo y Primitivo Rito de Memphis-Misraim». Con Papus realizó
experimentos olfativos en la Salpêtrière que luego utilizaría
como médico militar en las campañas revolucionarias y que publicaría en sus
libros[20]. Si
la Escuela Hermética y la Orden Martinista de Papus fueron las principales instituciones modelo en cuanto
a estructura institucional para su FRA de siete grados (otorgamiento de títulos
académicos, cursos, etc.)[21],
la Ordo Templis Orientis –de
la cual Krumm-Heller tenía el décimo grado máximo– fue
la principal influencia en cuanto a doctrina y rituales, particularmente los
ritos de Menfis-Misraim y la magia sexual.
El gran problema del ocultismo alemán consistía en la
inexistencia de estado nacional y en la dificultad para introducir los altos
grados de la masonería azul o simbólica[22].
En Alemania no había una Gran Logia Nacional, como en Inglaterra y Francia,
sino que existían la Logia de Hamburgo, Logia de Hanover, la de Berlín, etc.,
que no estaban interesadas en el esoterismo. Los cuatro futuros fundadores de
la OTO –Theodor Reuss, Karl Kellner,
Henry Klein y Leopold Engel–
apelaron entonces a la masonería irregular de sus países vecinos. Es decir, al
líder inglés del rito Menfis-Misraim, John Yarker; al cofundador de la Golden Dawn,
William Westcot; y a Papus,
de quienes obtuvieron cartas patentes para poder operar esos ritos en Alemania.
El objetivo fue crear una «Academia Masónica» para nuclear a todos los
iniciados alemanes de ese Rito y unificar todos los grados de masonería, siendo
Reuss el fundador del Supremo Soberano Santuario en
Alemania. Krumm-Heller introdujo en México este Rito
de vertiente alemana –que ya existía en este país gracias a Giuseppe Garibaldi–
y, posteriormente, dirigiría la FRA desde su Summum Supremum Sanctuarium,
ubicado en su propia casa-templo de dos pisos en Berlín, donde vivía con su
familia[23].
Al
llegar a México, fue apadrinado por tres destacados miembros de la comunidad
alemana. Uno de ellos –familiar suyo– en la «Royal Lodge:
teutones No. 13» del Rito alemán de Schroeder de siete grados. Esta logia,
exclusiva para inmigrantes de Alemania, de vez en cuando aceptaba visitas de
altos personajes del mundo político, comercial, cultural, social y masónico
mexicano, trabajando entonces con el Rito Escocés Antiguo y Aceptado y
ocultando el primero. Al igual que sucedía en Alemania, el REAyA
no estaba interesado en el esoterismo sino en centralizar la masonería y asegurar
la estabilidad política, teniendo la Logia Valle de México una dirigencia casi nacional
y militar, y absorbiendo en ese entonces a otras logias del Rito Nacional Mexicano[24]. Krumm-Heller buscaría institucionalizar su organización
esotérica en México a través de la masonería irregular, el rito de Menfis-Misraim –del cual era Gran Representante para este país– y
utilizando, a su vez, las redes de esta masonería ya centralizada de Valle de México,
de la cual obtendrá su carta credencial como Gran Maestre en 1916-1917[25].
En 1900 había llegado también a México Aleister Crowley, quien según sus Confesiones, fue iniciado en el grado
máximo del Rito escocés mexicano por don Jesús Medina, fundando juntos una
orden, The Lamp of Invisible
Light.[26]
Krumm-Heller se conocería con el célebre ocultista
inglés recién en 1930, pero –como veremos– tendría una perdurable relación con
Jesús Medina en México.
El otro aspecto de suma importancia que Krumm-Heller apropiaría de la OTO fue la magia sexual,
prácticas que retomarían y profundizarían posteriormente sus discípulos
latinoamericanos, como Samael aun Weor
en Colombia[27]
o José López Rega en Argentina en sus Conocimientos espirituales[28]. La OTO no sólo ofrecía los grados
masónicos de Menfis-Misraim, sino que tenía un «triángulo
interno» con los supuestos secretos de la magia sexual, una combinación de las
técnicas del tantra apropiadas del Oriente con los
rituales y prácticas sexuales de Pascal Beverly Randolph
y la Hermetic Brotherhood
of Luxor[29]. Influenciado
por el Lebensreform
en Alemania, para Reuss la magia sexual eran las
técnicas pertinentes no sólo para avanzar espiritualmente, sino que contenían
la clave para causar una reforma total de la vida social. La OTO era concebida
como una orden que, desde tiempo inmemorial, venía causando reformas y
revoluciones políticas a través de dichas prácticas, potencial ritual que sería
de indudable interés para Krumm-Heller en el México
revolucionario.
1905-1913: esoterismo y política en la campaña maderista
En la biblioteca de Francisco Madero se encuentra No fornicarás. Instrucciones sólo para
ocultistas, dedicado al «Maestro Masón y poderoso hermano Francisco I.
Madero, con los respetos de Huiracocha», junto a
simbología martinista y rosacruz. El mismo enseña al
iniciado técnicas de magia sexual consistentes en detener el acto sexual antes
de alcanzar el orgasmo para elevar y materializar el semen-deseo en el plano astral,
debiendo practicarse sólo con una mujer con la que se esté conectado
espiritualmente y “no fornicar”, es decir, no malgastar este valioso poder
seminal por puro placer sexual con cualquier mujer[31].
Krumm-Heller se convirtió en el esoterista
y médico personal de Madero a través de dos actividades complementarias que requerían
secrecía máxima, el espionaje y el esoterismo. En cuanto al primero, don
Arnoldo fue uno de los 40 agentes secretos alemanes que Felix
A. Sommerfeld, jefe de la Policía Secreta y director
del Servicio Secreto mexicano, puso a disposición primero de Madero y luego de
Carranza. Una actividad de espionaje que realizaría en México hasta 1920. Si Sommerfeld era la guardia personal de Madero, Krumm Heller se encargó de la
salud física y espiritual. Y junto con su mujer Sara y su hermano Gustavo, conformaron
su círculo más íntimo[32]. Sommerfeld trabajaba bajo el embajador Paul Von Hintze –a espaldas del embajador norteamericano Wilson– en
apoyo de Madero, enviando información a Gustavo y a la embajada alemana. Posteriormente,
laboró para Carranza, trayendo armas de Estados Unidos y Alemania con el fin de
derrotar a Victoriano Huerta[33]. Como
señala Friedrich Katz, Madero buscaba acercarse a
Alemania para contener el avance de los Estados Unidos, debiendo descartar a
Francia o Gran Bretaña ya que éstos habían sido los aliados naturales de «los
Científicos» positivistas durante el Porfiriato[34].
En el marco de estas tareas de espionaje y diplomáticas,
Madero comisionó a Krumm-Heller para estudiar los
procesos inmigratorios en Argentina y Chile[35].
Tras de la victoria presidencial, en una carta de 1912 le devolvió un informe y
propuesta: 1) No dar tierras a los inmigrantes –como en Argentina– sino que fueran
pequeños colonos alemanes los que comprasen tierras y se mezclasen con los
mexicanos; y 2) Escribir El México de
Madero en alemán para hacer propaganda en Europa y borrar su imagen de
anti-extranjero[36].
Estas ideas de mezcla racial entre alemanes y mexicanos y de propagandismo en
Alemania fueron los dos elementos constantes tanto de su imaginario esotérico
como de su actividad política. Madero respondió a sus propuestas negativamente,
argumentando que primero debía resolverse la cuestión agraria. Sin embargo, Krumm-Heller logró llevar a cabo sus dos propuestas durante
el gobierno de Venustiano Carranza, escribiendo bajo su pedido sus tan anhelados
libros de propaganda, entre ellos El
México de Carranza[37].
El segundo círculo de relaciones mencionado fue el del esoterismo.
Krumm-Heller asistió a los dos Congresos Espíritas de
México de 1906 y 1908, donde Madero fue miembro de la Junta Preparatoria y vicepresidente
respectivamente, apoyándolos económicamente[38].
Eso lo relacionó con quien sería su gran amigo y colega, el teósofo y profesor
de la Escuela Médica Militar Alfonso Montenegro –quien fue acribillado por los
villistas–, y lo inspiró para el personaje principal de su novela Rosacruz[39]. Krumm-Heller
daba sus conferencias en la logia Aura
(en ese entonces, Rama) de la
Sociedad Teosófica, recopiladas y publicadas luego por la editorial del
espiritista José Salvadores Botas[40]. La
junta central del congreso encomendó a Rossi y Morán,
del círculo Kardek de Ladero, específicamente para discutir
estas conferencias, que ya estaban impresas para 1909. El resultado: se aceptaron
las tesis de Krumm-Heller, afirmando que espiritismo
es sinónimo del «ocultismo occidental» que proponía el doctor y superior al «ocultismo
del oriente» y a la teosofía. Uno de los críticos fue el costarricense Rogelio Fernández
Güell, director del órgano oficial del congreso, Helios, quien juzgaba al ocultismo inferior[41]. La
participación en estos círculos espiritistas y teosóficos le dieron acceso al
círculo íntimo de Madero como médico-esoterista, siendo
su ferviente defensor durante la campaña de prensa anti-esotérica contra el
futuro presidente, que fue iniciada en 1903. En la misma, intervino un peculiar
esoterista italiano proveniente del mundo ocultista
francés.
Krumm-Heller era miembro de la orden de «Los iniciados del Tíbet»
fundada por Alberto de Sarak o «Conde de Das».
Prófugo de la justicia en Europa, el supuesto noble se dedicó a viajar y a fundar
«Centros esotéricos orientales» por Latinoamérica, creando en 1903, en el paseo
de la Reforma, su «Centro esotérico mexicano»[42].
En agosto del mismo año dio dos conferencias en el Salón de Geografía y
Estadística, en el mismo lugar donde el “Doctor en Cábala y estudioso de las
Ciencias Herméticas”, Krumm-Heller, también disertaba
sobre hatha yoga, ocultismo y la Atlántida, y
explicaba científicamente los milagros de la Virgen de Guadalupe[43]. Presentándolo
como un científico miembro de la Sociedad de Estudios Psicológicos de
Filadelfia, Sarak realizó experimentos y
prestidigitaciones en el Salón, dándole como obsequio al mismo Porfirio Díaz –allí
presente– una pintura realizada con los ojos cerrados[44]. Un
miembro de la orden martinista y grado 33 del REAyA, el ministro porfirista José Castellot,
designó luego a Sarak cónsul de México en Suiza –en
la ciudad de Lausana–, cargo que continuó bajo Madero[45].
Desde entonces intervino otro esoterista
local, Jesús Ceballos Dosamantes, denunciando profusamente
a Sarak y a Madero desde el diario La Patria de Ireneo Paz, abuelo del
poeta Octavio, quien publicitó su obra[46]. Dosamantes venía proponiendo, junto a su discípulo Troncoso,
una nueva síntesis filosófica entre ciencia y religión “contra el materialismo,
catolicismo y ocultismo”, en una serie de conferencias. Además, acusaba a
Madero de adherirse –desde 1903– a un “sistema masónico ocultista, mezcla de
espiritismo, masonería y catolicismo”, así como a una “rama de una liga oculta
anarquista internacional” derivada en el Centro Esotérico Mexicano[47].
El 12 de agosto de 1911 publicó “El Neo-Ocultismo Jesuita. Una Plataforma que
contiene la derogación de las leyes de Reforma y el aniquilamiento de la
Escuela Laica”, donde exigía al general Bernardo Reyes impedir la “hiedra
clerical”, argumentando que Madero estaba apoyado por el Partido Liberal
Católico y por Joséphin Péladan,
del círculo de Papus, con su Orden Rosacruz Católica.[48]
Desde el otro bando, Sarak y
este grupo papusiano fue protegido por Krumm-Heller,
Madero y por el masón y general José de la Paz Álvarez, todos afiliados al
Centro Esotérico Mexicano[49]. El
intelectual oaxaqueño Manuel Brioso y Candiani sugirió
a Ireneo Paz que se investigara al Conde de Sarak. El
8 de enero se dio un debate en las oficinas de La Patria donde participaron Ireneo Paz, el director del Centro
Esotérico Mexicano Emilio Calvayrae, Dosamantes y su discípulo Peña y Troncoso, el director del Mexican Herald y Krumm-Heller. Las polémicas alcanzaron tanta virulencia que
Huiracocha debió refugiarse en el Mexican Herald, como pudo verse en su segunda
conferencia, donde manifestó que había logrado conseguirse un local en ese
diario tras el “totum revolutum”
generado[50].
Al mismo tiempo, El Mexican Herald fue acusado
de “sarákiko” por Dosamantes
y Troncoso.
Como mencionamos, las actividades políticas y esotéricas fueron
indisociables. Y Krumm-Heller participó en la campaña
presidencial como inspector de los servicios médicos de campaña y como propagandista
en el periódico Nueva Era, donde
continuó recibiendo acusaciones en torno al esoterismo. En un artículo titulado
“Maderismo de manicomio”, de 1912, se recordaba que Huiracocha había predicho la caída de Díaz ocho meses
antes, se mofaron de él por pronosticar que 1913 sería el mejor año para México
y se burlaron de su “filosofía de boerillo”[51]. En
un informe realizado en 1915, Krumm-Heller recordaba
con pena esos eventos, señalando que era atacado a ambos bandos por su
esoterismo: por el artífice del artículo, el militar huertista
Antonio Rábago, quien aconsejaba a las autoridades
duchas frías y bromuro para el Dr., y el futuro Ministro de Comunicaciones de
Madero, Manuel Bonilla, quien “trató de perjudicarme en cuanto pudo”[52].
Krumm-Heller participó de la histórica toma de Ciudad Juárez del 10
de mayo de 1911, desde donde envió por telégrafo a Madero sus felicitaciones al
día siguiente[53].
Ya presidente, Madero lo nombró profesor de lengua y literatura alemana en la Escuela
Preparatoria, cargo al que renunciaría luego de su asesinato. El 24 de diciembre
de 1912 la Secretaría de Relaciones Exteriores lo había comisionado para
visitar museos, bibliotecas y archivos en Europa, viaje que debió cancelar por
los graves acontecimientos contra el presidente[54]. Según
relató, durante los cruciales días de la Decena Trágica, del 9 al 19 de febrero
de 1913, Madero lo había llamado para una “delicadísima misión en el Puerto de
Veracruz”, desde donde se sublevaría junto al coronel Ladrón de Guevara[55]. Asesinado
Madero, se dirigió a Guanajuato para levantar una guarnición y dio conferencias
en un teatro para generar una sublevación contra Huerta. Al salir de una de
estas intervenciones, fue aprehendido –junto al teniente coronel Andrés Peña– por
disposición de la Secretaría de Guerra y Marina, aplicándole Huerta el artículo
33 de la Constitución como “extranjero pernicioso”, para expulsarlo del país como
“súbdito chileno”. Don Arnoldo fue enviado a la Prisión Militar de Santiago de Tlateloco, donde pasó diez días en condiciones penosas,
encerrado en una jaula de hierro. Gracias a su mujer chilena, hija de
diplomáticos, intervino el cónsul de Chile, Eugenio Motz,
elevando un amparo el 22 de junio[56].
El 1 de Julio logró llegar a La Habana desde el puerto de Veracruz en el vapor
español «Montevideo», de paso para ir a Nueva York.[57]
1913-1917: guerra revolucionaria y esoterismo, Krumm-Heller y el constitucionalismo
En la frontera se encontró con los generales Lucio Blanco
y Ríos Zertuche, con quienes se incorporó después a la toma de Matamoros el 9
de agosto de 1913 contra Huerta. Bajo las órdenes del general Pablo González, y
como teniente coronel médico, participó en Monclova en el cuartel de Venustiano
y Jesús Carranza, como médico en el hospital de sangre de Ciudad Jiménez y en
una sala de Hospital de Matamoros, hasta que el 18 de junio Carranza dio un
banquete en Saltillo para avanzar a la capital y lo nombró jefe de hospital de
Tampico[58]. Krumm-Heller utilizó todos estos contactos militares para
levantar posteriormente su organización rosacruz desde Europa. Uno de ellos fue
el general Manuel González, uno de los primeros hombres del carrancismo,
secretario de Pablo González y jefe del Estado Mayor, quien en 1926 retornó a
México para instalarse en la ciudad de Monclova, antigua capital de Texas y
Coahuila. El 27 de enero de 1929, desde Berlín, Krumm-Heller
le otorgó una carta patente para establecer una logia de la FRA en esa ciudad[59], concediéndole
el diploma de «Bachiller en Ciencias Herméticas»[60]
(herencia de la Escuela Hermética de Papus) y nombrándolo
a tal efecto “Instructor General para México y los Estados Unidos de Norte
América, para que en su representación y en la del Sumo Supremo Santuario de
Berlín instale Logias y Centros Rosacruz y les imparta las enseñanzas de
nuestra fraternidad”[61].
En 1915, el Distrito Federal era reacio al carrancismo, de modo que el coronel Miguel Cid Ricoy, bajo órdenes de Pablo González, fundó el Partido
Nacional Socialista del carrancismo, con el objetivo
de conquistar ideológicamente la capital[62]. Krumm-Heller se ocupó de esta tarea bajo el cargo de director
de Escuelas de Tropa, pagado por el Ministerio de Instrucción Pública y Bellas
Artes. Se responsabilizó de dar discursos en escuelas y de la dirección de un
coro militar. Posteriormente fundó la Sociedad de la Cruz de Hierro, que tuvo sólo
dos miembros, Carranza como presidente y él como secretario, que
junto a la Sociedad Fraternal Alemana, pretendían ser los órganos del
proselitismo imperial alemán en México. Krumm-Heller estaría
involucrado también en los intereses petroleros en México, obteniendo de la
Secretaría de Guerra gasolina y aceite de la compañía petrolera El Águila[63].
El 29 de mayo de 1914 fue reprendido por Pablo González por “externar conceptos
sobre las relaciones de amistad que existen entre la Compañía Mexicana de
Petróleo El Águila S. A. y los altos jefes del Ejército Constitucionalista”, lo
cual “ha sido motivo para que el Sr. cónsul de Inglaterra se haya acercado hoy
a este cuartel general, inquiriendo lo que hubiere de verdad en este enojoso
asunto”[64]. La
delicada cuestión se encontraba en que El Águila, en creciente competencia con
la Waters Pierce y la Standard Oil
desde 1908, había girado 50.000 dólares a los emisarios financieros de Carranza
en Nueva York, en virtud de un arreglo por el suministro de combustible a los
constitucionalistas.[65]
Otra figura relevante de la intelectualidad mexicana
vinculada a Huiracocha fue el pintor Gerardo Murillo,
Doctor Atl, nombre que le puso en París el poeta
argentino Leopoldo Lugones. Recién llegado de Europa, fue el encargado de
reunirse con la anarcosindicalista Casa del Obrero Mundial para poner fin a la
huelga contra la Compañía Telefónica y Telegráfica Mexicana. Tras estas
actividades se dio el famoso pacto entre el Constitucionalismo y la COM[66],
donde Krumm-Heller tuvo un cargo en la mesa directiva
y participó en la formación de los batallones rojos de obreros para combatir al
zapatismo y al villismo. Don Arnoldo dio discursos
junto al Doctor Atl en fábricas y en la COM sobre “la
psicología del obrero”, “el papel de la ciencia para educar al obrero mexicano”
y “las ventajas del sindicalismo y el constitucionalismo”[67]. Ambos
fueron los enviados no oficiales para negociar con Zapata en Morelos,
advirtiéndole Krumm-Heller al consejero militar del
zapatismo, el general Antonio Díaz Soto y Gama, que el plan de Wilson era
agotar los recursos de México para invadir militarmente[68]. También
ofreció a Francisco Villa entrenamiento militar por parte de oficiales alemanes
–pero Villa lo rechazó–, y participó como médico militar en las batallas de
Silao, Aguascalientes y Celaya. En ésta última Álvaro Obregón perdió un brazo (a
raíz de esto conocido fue como «el manco de Celaya») y fue al coronel Krumm-Heller a quien le ordenó tomar el mando de la
batalla, quien liquidó a Villa.[69]
Tras la conquista de la capital, Carranza premió a la COM
–por su apoyo al constitucionalismo– con la aristocrática Casa de los Azulejos,
sede del Jockey Club[70]. En
esta misma, donde se había fundado el Ateneo del Obrero, Krumm-Heller
fundó y fue director de la Escuela Racionalista, basada en los principios educativos
del anarquista catalán Francisco Ferrer Guardia, fusilado en Barcelona en 1909[71]. La
velada de inauguración se dio en el Teatro Abreu, hoy Palacio Legislativo, donde
disertaron el socialista argentino Dr. Pratts como
representante de prensa, el profesor mexicano Manuel E. Velasco y el masón
Jesús Medina, que –como vimos– conocía desde sus inicios masónicos en México.
En el discurso inaugural, Krumm-Heller manifestó que
dicha educación llevaría al “socialismo universal”, donde todos los hombres y
mujeres serían iguales; que “el constitucionalismo no es capitalismo”; y
presentó ante la audiencia, como modelo a seguir, al general Silvino Rodríguez,
por sus orígenes humildes[72]. Según
Krumm-Heller, la Escuela Racionalista era el ideal
más avanzado de los obreros de América Latina, porque evitaría a los obreros ir
a “escuelas clericales” o de la “ciencia oficial”. Según los principios
educativos de su maestro Rudolf Steiner, esto llevaría a un desarrollo de la
glándula pineal de los futuros obreros mexicanos, la cual estaba más desarrollada
en hombres con más fuerza de voluntad y dominadores de multitudes, idea ya
presente en el “No Fornicarás” regalado a Madero en 1912.[73]
En 1916, Carranza lo comisionó a Estados Unidos para
ejecutar el Plan de San Diego e iniciar una guerra racial entre los mexicanos y
alemanes radicados allí en contra de los norteamericanos. Krumm-Heller
dio conferencias sobre la “unión natural” que existe entre el pueblo alemán y
el mexicano, financiadas por el cónsul de Texas, Eliseo Arredondo, quien le
enviaba los discursos en inglés redactados por el ideólogo del carrancismo Luis Cabrera[74].
Estos esfuerzos fueron muy recompensados por Carranza, quien accedió el 5 de febrero
de ese año a su pedido de naturalización como mexicano[75],
y le otorgó el 1 de mayo el título de doctor honoris causa de la UNAM, “en atención de los servicios que ha
prestado a la Causa Constitucionalista, a que ha publicado diversas obras de
carácter científico y a que ha contribuido a la fundación de hospitales militares
en campaña”[76].
1917-1920: imperialismo y esoterismo, Krumm-Heller
legado militar en Alemania
El 28 de abril de 1916 Carranza ordenó a la Secretaría de
Guerra y Marina dar de baja a Krumm-Heller de su
comisión en Estados Unidos, con el pretexto oficial de enviarlo a Alemania a
estudiar las escuelas de tropa e instrucción, pero donde –en realidad– realizó
tareas de espionaje claves[77].
Mandado con la excusa de agradecer el reconocimiento del Gobierno Suizo, en un
primer viaje fue interceptado por la Scotland Yard en Nueva York, detenido en
una prisión en Kirkwall y presentado ante los
Tribunales de Londres, para ser regresado finalmente a Estados Unidos[78].
En un segundo intento logró ingresar por España y Suiza, llegando oficialmente
a Alemania como agregado militar de la legación mexicana en Berlín, dirigida
por el encargado de negocios, el abogado mexicano José Almaraz. Por encargo de
Carranza, había escrito en alemán su obra de propaganda Por la libertad y la justicia. Mis vivencias en la Guerra Civil
mexicana[79], prologada por Almaraz, además de la
mencionada El México de Carranza, que
luego ampliará en México, mi patria
en 1919[80].
Para tal fin, compró una de las casas editoriales más grandes e importantes de
Alemania, la antigua razón social Kämmerer & Co
en la ciudad de Halle, con edificios, maquinaria y personal, reconvirtiéndola en
la Dr. A. Krumm-Heller Verlagsanstalt,
desde donde imprimiría tanto sus obras de propaganda constitucionalista como diversos
compendios esotéricos, tanto propios como ajenos. Entre ellos al ariósofo Albert Chistian Georg Schultz o “Peryt Shou” (1873-1953), su colaborador y secretario durante
varios años[81],
de quien editó su libro sobre religiones solares y meditación Concentración y voluntad[82].
Según las fuentes del FBI, la misión secreta de Krumm-Heller –conocido desde entonces por la inteligencia norteamericana
como «Dr. Von Carey»– era establecer una colonia alemana de largo alcance en
México[83],
mientras que –de acuerdo con lo que aseguraba el propio doctor en sus informes
a la Secretaría de Relaciones– su objetivo era “fomentar las simpatías por
nuestro país en este imperio”[84].
La actividad central de Huiracocha fue visitar los
centros industriales alemanes, en particular la fábrica de acero Krupp,
realizar tareas de propaganda y espionaje militar para dar cuenta a la Secretaría
de Guerra y conseguir armamento para los constitucionalistas. Volvió a visitar
a Krupp Von Bohlen y Halbach
por segunda vez, esta vez invitado personalmente a su castillo, mientras que el
resto de los diplomáticos se quedaban en un hotel por cuenta de la casa comercial.
Entre sus informes políticos se leía lo siguiente sobre esta visita:
Fue, como todos los alemanes de
la época pasada, entusiasta partidario de don Porfirio y sus conocimientos
sobre el México actual eran difusos, hasta que según me dijo había leído mi
libro “El México de Carranza”, por lo que quiso conocerme personalmente. Hoy
Krupp es carrancista, casi tan fanático como yo, que quiere decir mucho. […] Krupp
ya ha agotado las minas de África, Bilbao, Holanda y quieren comprar en México.
Se están haciendo experimentos en Essen para desazulfurar el hierro de las minas de México. Harán todo
lo posible para quedarse con todas las riquezas de Durango[85].
Luego de haber estudiado a fondo la minería mexicana bajo
pedido de Carranza, Krumm-Heller llegó a la
conclusión de que en este país se encontraban las minas más ricas del mundo
para que Krupp fabricara armas (¡cómo no habrían de levantarle un monumento a
Humboldt!). La Casa estaba dispuesta a aceptar ingenieros y obreros mexicanos
para que practicaran en sus establecimientos. Para Krumm-Heller,
el consorcio alemán –empleador en ese entonces de medio millón de obreros– era el
ejemplo y modelo para seguir por la Casa del Obrero Mundial:
Los miembros de la Casa del Obrero
Mundial anhelan un reparto de bienes al sistema socialista, pretenden con
justicia que cuando ya no puedan trabajar tengan asilos hospitalarios para
pasar sus últimos días, exijen (sic) el sueldo gratis cuando ya cansados del trabajo disfruten del
descanso en el crepúsculo de la vida, pues todo aquello se ha realizado
prácticamente en Essen, allí el empresario reparte
honradamente con sus obreros[86].
En síntesis, si Alemania ganaba la guerra, lo que se
buscaba era la instalación de un gobierno de tipo corporativo en México
alineado con los intereses imperiales germanos. Krumm-Heller
se convirtió así en el principal representante de los intereses comerciales e
imperiales alemanes en México, poder político que utilizó para levantar su
organización esotérica en todo el continente americano[87]. Esto
sucedió tras una serie de conferencias que Krumm-Heller
dio en Cassel, Múnich, Hall, Marburgo
y Fráncfort para conseguir el apoyo del gobierno alemán al carrancismo
y que aprovecharía para su propia causa ocultista[88]. En
Múnich fue recibido por el Káiser, a quien le entregó personalmente su libro Por la libertad y la justicia, y donde participaron
miembros de la cámara de comercio alemana, la prensa, el encargado Leopoldo
Ortiz (quien reemplazó a Almaraz), la infanta de España, y el príncipe real
Leopoldo y la princesa Pilar, quienes manifestaron querer conocer México. Allí ofreció
sus servicios como agente de inteligencia al Ministerio de Relaciones
Exteriores del Imperio y consiguió financiamiento de la Cancillería alemana
para publicar su novela Rosacruz en
España[89].
En 1919 Krumm-Heller volvió a México y Carranza lo
nombró director general de Escuelas Especiales, tema que había sido su pretexto
oficial para ir a estudiar a Alemania, pudiendo ocuparse a partir de allí de
montar su FRA en Latinoamérica con todo el capital político y económico
acumulado como agente del imperialismo alemán.
1920-1936: la FRA y la formación del campo esotérico
latinoamericano
El 21 de
agosto de 1920 Krumm-Heller fue dado de baja del
cuerpo médico militar por extranjero y se le concedió licencia ilimitada[90].
Desde entonces, pasó la mayor parte del tiempo en Europa. Primero, en España –hasta
el ascenso de Franco– y, luego, en su casa de Berlín, desde donde se ocupó de
organizar su institución esotérica en Latinoamérica y complotar contra el gobierno
de Álvaro Obregón y sus sucesores. Para esto pidió al Estado Mayor seguir
trabajando gratis como agregado militar al margen de su licencia ilimitada,
propuesta rechazada parcialmente ya que sólo le permitieron “verificar los
estudios que estime conveniente en el orden militar y de los que pueden
aprovecharse indudablemente algunas enseñanzas”[91].
Don Arnoldo utilizó esto para seguir haciéndose pasar como oficial del Estado
Mayor, contribuir con armas e información a los rebeldes de México y continuar
recibiendo encargos políticos. Por ejemplo, José Vasconcelos, desde el
Departamento Universitario y de Bellas Artes, lo comisionó en 1921 para
establecer un intercambio de profesores alemanes en México y recibir alumnos
mexicanos en Alemania, pidiéndole informes y que “haga todo lo posible para
mejorar las relaciones intelectuales entre universidades europeas y de México”[92].
Sin embargo, el 26 de mayo se advirtió al embajador Eckardt
y al ministro mexicano en Berlín que Krumm-Heller seguía
haciéndose pasar por comisionado de México. El 1 de junio se recibió una
acusación en la embajada de un tal Hermann Ungemach quien denunciaba que Krumm-Heller
proclamaba que “un día el gobierno mexicano será volteado y volverán los amigos
de Carranza”[93].
Huiracocha encontró numerosos obstáculos para sus
actividades políticas en el nuevo gobierno mexicano y se volcó de un modo más
completo en la actividad esotérica. El 1 de diciembre de 1921 publicó en su
imprenta, con Theodor Reuss, el primer número de la
revista Der Rosenkreuzer,
como órgano oficial de la «Societas Rosicruciana in Germania et Austria», fundada por Karl Kellner y Franz Hartmann, de quienes se decían sucesores.
El documento fue una invitación (Einladung) a todos los rosacruces del mundo a sumarse para
el año 1922 a una organización que “ya ha elegido delegados en Estados Unidos,
México, Alemania y Austria”, lo que podría considerarse la etapa formativa de
la FRA[94]. En
mayo de 1924 partió desde el puerto de Hamburgo para comenzar su gira ocultista
por Latinoamérica con el objetivo de participar él mismo en la fundación de las
logias, usualmente en las capitales, y emitiendo cartas patentes como la que ya
mencionamos al general Manuel González. Entre estos instructores se encontraba
el artista plástico argentino Xul Solar, diseñador de
las cartas patentes y diplomas de la organización, cofundador e instructor de
la logia Kepler en Buenos Aires y activo colaborador entre 1929-1931[95].
Entre los mexicanos, figuró el poeta Amado Nervo, amigo de Krumm-Heller,
a quien habría conocido antes de que viajara a París. Nervo habría sido miembro
“honorario” de la FRA, aunque no hay hasta el momento documentación definitiva sobre
esto. Lo seguro y estudiado es que se han encontrado similitudes en algunas de
sus poesías con los escritos de Huiracocha y que éste
tradujo sus poemas al alemán[96].
Las autoridades mexicanas tenían a Krumm-Heller
como un agitador y vinculaban su gira esotérica al espionaje y sus “actividades
antipatrióticas”. El cónsul general de Bremen advirtió al resto de las autoridades
mexicanas, españolas y latinoamericanas de su presencia, lo cual dificultó en
gran medida las actividades esotéricas del doctor[97]. Frente
a esto, antes de ir a cada ciudad, Krumm-Heller solicitó
apoyo por correspondencia a un viejo aliado de gran infraestructura, la
Sociedad Teosófica, aunque tuvo respuestas muy poco satisfactorias. El caso más
paradigmático y problemático fue el de Bogotá. Fundó el 27 abril de 1928 la logia
Ramussen en
esa ciudad, donde se publicó la revista Rosacruz
a partir de 1934. El líder de la logia de esa ciudad, Ismael Rojas Romero, abandonó
al ocultista alemán por otro personaje que decía estar instruido por mahatmas
del Tibet, Omar Cherenzi, a
quien Krumm-Heller acusó de mago negro mientras que
el presunto tibetano de propagandista nazi en España[98].
Entre marzo de 1929 y abril de 1930, Krumm-Heller
recorrió prácticamente todos los países de Latinoamérica en un ciclo de
conferencias. Esta gira coincidió con la de Jinarajadasa, quien también estuvo
en 17 países de Latinoamérica enviado por la Sociedad Teosófica con el fin de
fundar logias de la ST[99].
La competencia por el liderazgo en materia esotérica se hizo sentir, ya que muchos
de los esfuerzos de la Sociedad Teosófica estaban puestos en intentar llevar a Krishnamurti como instructor de la Humanidad, quien, si
bien renunció a su liderazgo mundial en agosto de 1929 en Holanda, no se
disoció de la ST hasta 1938 y buena parte del público latinoamericano seguía respondiendo
a las viejas enseñanzas[100].
Las relaciones cordiales se rompieron en la propia gira. El 10 de enero, el secretario
de la Sección Centroamericana de la Sociedad Teosófica, Mariano Coronado, advirtió
a los miembros de otras logias que había recibido desde Bogotá la advertencia
de que Krumm-Heller estaba pidiendo ayuda a la ST
pero que era abiertamente hostil a ella[101].
En ese mismo año otros de sus discípulos se independizaron también de su
liderazgo. Por ejemplo, el argentino Carlos González Pecotche,
Raumsol,
quien, si bien lo llamaba “su maestro” en el prólogo que escribió en Logos, Mantram,
Magia, publicado en 1930, fundó su propia corriente ese mismo año en la
ciudad argentina de Rosario, la Logosofía, y se proclamó a él mismo «Redentor
de la Humanidad»[102].
Naturalmente, el campo esotérico latinoamericano se hizo marcadamente más
plural y competitivo que en la década de 1910. Y desde la revista Rosacruz se advirtió una nueva línea:
que la Gran Fraternidad Blanca seguía existiendo pero que no había maestros[103].
Tras la gira latinoamericana regresó a Berlín, donde finalmente
conoció a Aleister Crowley.
Lo consiguió a través de Martha Küntzel, quien le dió su dirección. Crowley fue el
encargado de reformar los rituales de la OTO para que no compitieran con los de
las Grandes Logias masónicas. Y el 22 de junio le envió a Huiracocha
los cuatro rituales de Reuss reformados para conocer
su opinión, junto con el Liber Aleph,
influencias thelémicas que pudieron verse en sus
obras posteriores a 1930[104].
En España se quedó hasta 1936, en condiciones políticas mucho menos favorables,
como director de una clínica de niños y una fábrica farmacéutica. En 1938 lo
ubicamos en Saltillo como aliado del general Nicolás Rodríguez, fundador de la
Acción Revolucionaria Mexicanista o los «Camisas Doradas», de quien Krumm-Heller fue representante en el Frente Nacional Suizo
y en Alemania, donde lo comisionaron para enviarle personalmente saludos al Führer y al Reichskanzler[105].
El 11 de febrero de 1936 el Judenkenner (“reconocedor de judíos”) persiguió a la comunidad
cristiana de Steiner y acusó a Krumm-Heller de judío
y de querer imponer el comunismo en comunidades de mujeres y niños[106].
Sus tareas esotéricas no se detuvieron, sino que en 1939 obtuvo el último de
sus nombramientos como obispo de la Iglesia Gnóstica y patriarca para Alemania
y Austria por parte de Constant Martin Chevillon[107].
En 1942 los nazis le confiscaron la biblioteca y el 30 de julio le escribió a Goebbels al Reichspropaganda Büro für Kurhessen,
quien le asegura que no se tomarían más acciones[108].
En sus últimos años circuló por su casa en Berlín el exsecretario general de la
Sociedad Teosófica de Adyar, Johannes Maria Verweyen, y Emil Bock, jefe de la comunidad cristiana de
Steiner, muriendo en Marburg el 19 de mayo de 1949.
Conclusiones: Latinoamérica, ¿esoterismo occidental?
Según Marco Pasi, la cábala
ocupó un rol central en la delimitación de las tradiciones «occidentales» de
las «orientales» que realizaron los esoteristas,
siendo la misma Blavatsky quien distinguió entre una «cábala
oriental» superior a la «cábala occidental» de los judíos[109].
En la obra libresca de Krumm-Heller se observa la
mencionada «reacción hermética» típica de organizaciones como la Hermetic Brotherhood of Luxor, la Hermetic Order of the Golden Dawn o la antroposofía de Rudolf Steiner, al distanciarse
de ciertas tradiciones concebidas como «orientales» e insistiendo en las raíces
prehispánicas de la América Latina. Mientras que en 1908 decía que la cábala era
sinónimo de «esoterismo occidental» y que venía del pueblo hebreo[110],
en 1931 afirman que la verdadera cábala era la “aria” o “nórdica”, que en
verdad surgió en la Península de Yucatán y los judíos se la apropiaron[111].
Más allá de los argumentos antisemitas esgrimidos, se observa un desplazamiento
geográfico de lo que es el «esoterismo occidental» hacia América Latina e
incluyéndose nuevos elementos que tienen que ver con las tradiciones
prehispánicas como –por ejemplo– indígenas masones o rosacruces, como el que
inicia a Montenegro en la cueva Cincalco del bosque
de Chapultepec en su novela Rosacruz[112].
A su vez, se realiza una fuerte delimitación de estas «tradiciones occidentales»
con respecto a «lo oriental», dentro de lo cual se concibe a un «ocultismo
oriental» pero también a la cábala judía que ya no pertenecería al «esoterismo
occidental»[113].
Estas operaciones pueden observarse, por ejemplo, comparando la versión en
alemán de su novela Der Rosenkreuzer aus Mexico. Okkultischer Roman publicada en 1919 con su traducción al español de
1926. En general todos los elementos teosóficos incluidos en la primera son
suprimidos y, por el contrario, agregados en la segunda versión elementos
rosacruces y prehispánicos que no están en la original[114].
En una conferencia dada en Brasil en 1936 Krumm-Heller
aseguraba que existía “una corriente de sangre entre los pueblos germánicos
donde se originan las runas, los toltecas y los aborígenes de Brasil, lo cual
habla de esa relación de corazón que debe existir entre Alemania, América
Latina y Brasil”[115].
La nueva delimitación doctrinaria e institucional del esoterismo estuvo inseparablemente
ligada, como vimos, a su actividad política como representante del imperialismo
alemán y al reacomodamiento de las fuerzas mundiales tras la Primera Guerra. En
este sentido, el esoterismo en América Latina se conformó con claras
implicaciones imperialistas para el continente que no deben subestimarse[116].
En
México este nuevo discurso hispanista e indigenista había sido impulsado por el
proyecto cultural del gobierno de Álvaro Obregón y José Vasconcelos como secretario
de Educación Pública en 1921-1924. Como señala Ricardo Pérez Montfort, la década posrevolucionaria de 1920 se caracterizó
por una despolitización del discurso del estado mexicano y por el surgimiento
de un nacionalismo que procuró buscar una nueva identidad nacional, apelando a
una referencia mítica que unía el pasado prehispánico con el presente a partir
de una revaloración romántica[117].
El mejor ejemplo fue La raza cósmica.
Misión de la raza iberoamericana, que Vasconcelos publicó en 1925. En este
texto el intelectual oaxaqueño construyó una Prisca theologia en México: hubo una raza
Atlántida anterior a las civilizaciones mesoamericanas cuya sabiduría, tras el
rompimiento de los continentes, pasó al antiguo Egipto. La famosa Tabla Esmeralda había sido –según él–
una esmeralda colombiana escrita por aborígenes, conocimientos que luego Hermes
Trismegisto plasmó en sus libros. Vasconcelos escribió
que “los mismos blancos, descontentos del materialismo y de la injusticia
social en que ha caído su raza, la cuarta raza, vendrán a nosotros para ayudar
en la conquista de la libertad”, al mismo tiempo que estaba encomendando a Krumm-Heller para llevar profesores alemanes a México[118].
Recordemos que, en La
Doctrina Secreta, Blavatsky afirmaba que los
toltecas eran una subraza de la cuarta, la Atlántida,
mientras que Jinarajadasa elaboró una compleja clasificación de las razas en
cada país latinoamericano visitado, trasladando la clasificación blavatskiana a la séptima subraza
de la quinta, la aria[119].
Si para Vasconcelos, en 1924, México sería el lugar de origen de la quinta, ya
en 1908 Krumm-Heller afirmaba que era el lugar de
origen de la sexta, movimiento evolutivo que iría hacia el sur, lo cual, según
él, ya era visible en Santiago y en Buenos Aires, donde podían verse los
destellos de la raza superior: “la última raza será la séptima, que tendrá la
glándula pineal más desarrollada y tendrá el poder del sexto sentido psíquico”.[120] Como
señala Tomás Pérez Viejo, en el corazón de los debates sobre la identidad
nacional desde mediados del siglo XIX se encontraba la pregunta sobre cuál era
la “raza primigenia” primordial y cuál era el proceso de fusión que habría dado
lugar a diversas naciones-raza con características distintas que le dieron
origen[121].
El problema de la raza y de los orígenes nacionales se encuentra así en el
núcleo de la conformación doctrinaria e institucional del esoterismo en México
y que retomarán otros esoteristas en Latinoamérica. Para
Arnold-Krumm Heller, la Fraternitas Rosacruciana
Antiqua tenía el objetivo de asegurar esta
evolución planetaria en el continente y la Revolución Mexicana era el puntapié
y el combustible de este proceso que se completaría con la unificación latinoamericana.
Para algunos ariósofos, como su secretario Peryt Shou, en esta evolución se encontraba
el “Polo Norte” o “Rueda solar” (Sonnenrad), fuente
espiritual de la raza aria, mientras que su contraparte, el “Polo Sur”, era el
lugar de la mayor materialización y de todas las energías demoniacas encabezadas
por los Estados Unidos[122].
Los arios debían, por lo tanto, proyectar su potencial espiritual hacia el Sur
a fin de aprovechar esos poderes para sus propios objetivos en la recuperación
“del Norte”, lo cual reflejaba en verdad los intereses del káiser por anclarse
en América del Norte en una carrera tardía de obtención de colonias. Al mismo
tiempo, la organización resultó atractiva a intelectuales latinoamericanos influenciados
por el hispanismo y el indigenismo usualmente germanófilos, como los ya mencionados
José Vasconcelos o Xul Solar, que buscaban encontrar
una nueva identidad para el continente en oposición al “materialismo” de los Estados
Unidos y lo anglosajón.
Archivos
México
Archivo General de la Nación (AGN). Fondo Madero.
Archivo Histórico de la Secretaría de la Defensa Nacional (AHSDN). Departamento
de Archivo Correspondencia e Historia. Archivo de
cancelados.
Archivo Histórico Genaro Estrada de la Secretaría de Relaciones Exteriores
(AHGN). Acervo Histórico Diplomático.
Archivo Histórico de Petróleos Mexicanos (AHPM).
Archivo General del Poder Judicial (AGPJ). Departamento de Archivo
Histórico.
Biblioteca Nacional de México (BNM). Colección Archivos y Manuscritos.
Acervo del Centro de Estudios de Historia de México (CONDUMEX). Archivo de
Francisco I. Madero. Manuscritos del General Manuel Willars
González.
Dirección General de la Promoción Cultural Obra Pública y Acervo
Patrimonial, Secretaria de Hacienda y Crédito Público, Palacio Nacional (PN).
Archivo Francisco I. Madero.
Hemeroteca Nacional de México (HNM).
Archivo de la Antiqua Orden Masónica de los Ritos
Egipcios de Memphis Misraim.
Francia
Bibliothotèque Municipal de Lyon (BML). Fond Papus.
Estados Unidos
National Archives (NA).
The Library of Congress (LC). Chronicling America.
Historic American Newspapers.
Alemania
Politisches Archiv des Auswärtigen Amts (PAAA).
Geheimes Staatsarchiv Preußischer Kulturbesitz (GSPK).
Staatsarchiv Hamburg (SH).
Suiza
Kantonsbibliothek Appenzell Ausserrhoden
(KAA). Collectio Magica et Occulta.
Bibliografía
Arteaga Castillo, Belinda. La escuela
racionalista de Yucatán: una experiencia mexicana de educación anarquista
(1915-1923). México:
Universidad Pedagógica Nacional, 2005.
Asprem, Egil. “Beyond the West: Towards a New Comparativism in the Study of Esotericism”. Correspondences 2.1, (2014), 3-33.
Bubello,
Juan Pablo. Historia del esoterismo en
Argentina. Buenos Aires: Biblos, 2010.
Campos, Marcelo. “Esoterismo ocidental em terras latinoamericanas: notas
sobre o Movimento Gnóstico de Samael
Aun Weor”. REHMLAC+,
8, 1 (2016), 24-49. http://dx.doi.org/10.15517/rehmlac.v8i1.24283
Charles Brown, Jonathan. Petróleo y
revolución en México. México: Siglo XXI, 1998.
Chaves, José Ricardo. “La pérdida de la Estrella. La gira de Krishnamurti por América Latina en 1935”. En Estudios sobre la historia del Esoterismo
Occidental en América Latina: enfoques, aportes, problemas y debates.
Editado por Juan Pablo Bubello, José Ricardo Chaves,
Francisco de Mendonca Junior. México-Buenos Aires:
Facultad de Filosofía y Letras de la UBA-Instituto de Investigaciones
Filológicas de la UNAM, 2017.
Chaves, José Ricardo. México
heterodoxo: diversidad religiosa en las letras del siglo XIX y comienzos del XX.
México: Bonilla Artigas, 2013.
Devés Valdez, Eduardo. El
pensamiento latinoamericano en el siglo XX: Del Ariel de Rodó a la CEPAL
(1900-1950). Buenos Aires: Biblos, 2000.
Dosamantes, Jesús Ceballos. Ciencia y religión
del porvenir. Solución a los grandes problemas. México: Eduardo Dublán Impresor, 1897.
Dosamantes, Jesús Ceballos. El
perfeccionamiento absoluto. Bases fundamentales de un nuevo sistema filosófico.
México: Imprenta de Eduardo Dublán, 1888.
Dosamantes, Jesús Ceballos. Fariseos y Saduceos
modernos. (Místicos y materialistas). México: Tipografía de Dublán y Compañía, 1889.
Dosamantes, Jesús Ceballos. La gran
mistificación maderista. Jesuitas y pseudo-científicos
ante la moral y la ciencia. México: Imprenta de A. Carranza e Hijos, 1911.
Evans, Tripp. Romancing the Maya: Mexican Antiquity
in the American Imagination, 1820-1915. Texas: University of Texas Press, 2004.
Fabela,
Isidro y Fabela, Josefina. Documentos históricos de la Revolución Mexicana XVI,
Revolución y Régimen Constitucionalista, Volumen 4°, Tomo I. México: Editorial Jus S. A,
1969.
Flores Zavala, Marco Antonio. “La masonería en el centro-norte de México,
1869-1914”. REHMLAC+, 6, 1 (2014),
109-130. https://revistas.ucr.ac.cr/index.php/rehmlac/article/view/15229/14528
Girgois,
Henri. L'occulte chez les aborigènes de l'Amérique du Sud.
Paris: Chamuel éditeur,
1897. Traducción: Girgois, Henri. El oculto entre los aborígenes de la América
del Sud. Los quichuas raza ariana. Barcelona:
Establecimiento Tipográfico de Juan Torrents y
Corral, 1901.
Godwin, Joscelyn. The Hermetic Brotherhood of Luxor: Initiatic and Historical Documents of an Order of Practical
Occultism. York Beach: Weiser Books, 1995.
González, Manuel. Con Carranza. Episodios
de la Revolución Constitucionalista 1913-1814. México: Instituto de las
Revoluciones de México, 2015.
Goodrick-Clarke, Nicholas. Black
Sun: Aryan Cults, Esoteric Nazism, and the Politics of Identity. New York-London: NYU Press, 2003.
Goodrick-Clarke, Nicholas. The Occult Roots of Nazism: The
Ariosophists of Austria and Germany 1890-1935. Wellingborough: Aquarian
Press, 1985.
Granholm, Kennet. “Locating
the West: Problematizing the Western in Western Esotericism and Occultism”. En Occultism in Global Perspective.
Editado por Henrik Bogdan
& Gordan Djurdjevic. London: Equinox Publishing ltd, 2011.
Hanegraaff, Wouter J. “Esotericism
Theorized: Major Trends and Approaches to the Study of Esotericism”. En Religion: Secret Religion. Editado por April
D. DeConick. San Francisco: Macmillan,
2016.
Hanegraaff, Wouter. “The Globalization
of Esotericism”. Correspondences 3 (2015):
55-91.
Heller, Karl B. Reisen in Mexiko
in den jahren 1845-1848. Leipzig: W. Engelmann,
1853.
Hivert-Messeca,
Yves y Mola, Aldo. L’Europe
sous l’acacia: Histoire des
Franc-maçonneries européennes
du XVIIIe siècle à nos jours. Tome 2: le XIX siècle. Paris: Dervy, 2016.
Introvigne, Massimo. Il
ritorno dello gnosticismo. Carnago: Sugar Co Edizioni, 1993.
Jinarajadasa, Curruppumullage. “Un año de viaje
por América Latina”. El Loto Blanco, 1930.
Kaczynski, Richard. Forgotten Templars: The Untold Origins of Ordo Templi
Orientis. R. Kaczynski, 2012.
Katz, Friedrich. The
Secret War in Mexico: Europe, the United States, and the Mexican Revolution.
Chicago: University of Chicago Press, 1981.
König, Peter-Robert. Der OTO-Phänomen-Reload. München: ARW,
2011.
König, Peter-Robert. Ein Leben für die Rose (Arnoldo Krumm-Heller).
München: ARW, 1995.
Krumm-Heller, Arnold. Carranzas Mexiko: Gesammelte
Abhandlungen über das Land
der Azteken. Berlin:
Otto Thiele, 1917.
Krumm-Heller, Arnold. Conferencias
esotéricas. Ciudad de México: Ediciones Botas, 1950.
Krumm-Heller, Arnoldo. “Curso Esotérico de Magia Rúnica del maestro Huiracocha
(Arnold Krumm Heller”. En Las
Enseñanzas de la Antigua Fraternidad Rosacruz. Málaga: Editorial Sirio,
1987.
Krumm-Heller, Arnoldo. “Cursos por correspondencia de la Fraternitas Rosacruciana Antiqua, con sede en
Berlin-Heiligensee-Alemania
dictados por su Comendador para Hispano-América”.
Krumm-Heller, Arnold. Del
incienso a la osmoterapia. Santiago de Chile:
Editorial Cultura, 1936.
Krumm-Heller, Arnold. Der Rosenkreuzer aus Mexiko:
Okkultischer Roman. Halle,
Dr. Krumm-Heller Verlagsanstalt 1919.
Krumm-Heller, Arnold. Rosa-Cruz: Novela de ocultismo iniciático. Barcelona: Maucii, 1925.
Krumm-Heller, Arnold. “El Zodiaco de los Incas en comparación
con el de los Aztecas”. Actas del XVII
Congreso Internacional de Americanistas. Ciudad de México, 1910.
Krumm-Heller, Arnold. Für Freiheit und Recht: meine Erlebnisse aus dem mexikanischen
Bürgerkriege. Berlin: Otto Thiele, 1917.
Krumm-Heller, Arnold. Mexiko, mein Heimatland!: Gesammelte Abhandlungen
über das Land der Azteken.
Halle: Krumm-Heller, 1919.
Krumm Heller, Arnoldo. No
fornicarás. Ciudad de México: Librería de la Vda. De Ch. Bouret, 1912.
Krumm-Heller, Arnold. Osmologische Heilkunde: Die
Magie der Duftstoffe. Berlin:
Schikowski, 1955.
López, Hernán Facundo. “José López Rega, ‘El
Brujo’”. En Estudios sobre la historia
del Esoterismo Occidental en América Latina: enfoques, aportes, problemas y
debates. Editado por Juan Pablo Bubello, José
Ricardo Chaves, Francisco de Mendonca Junior. Ciudad
de México-Buenos: Facultad de Filosofía y Letras de la UBA-Instituto de
Investigaciones Filológicas de la UNAM, 2017.
Martínez Moreno, Carlos Francisco. “Coaliciones y traiciones masónicas. De
la primera reelección de Porfirio Díaz a los inicios de la revolución mexicana,
1887-1911”. REHMLAC+ 7, no. 2 (diciembre
2015-abril 2016): 238-266. http://dx.doi.org/10.15517/rehmlac.v7i2.22853
Pacheco Vigne, Ana. “Plenitud de Amado Nervo:
¿prosa aforística o poemas en prosa?”. Literatura
Mexicana XVI, no. 1 (2005):
27-64.
Pasi, Marco. “Oriental Kabbalah and the Parting of East and West in the
Early Theosophical Society”. En Kabbalah and Modernity: Interpretations, Transformations, Adaptations.
Editado por Boaz Hus, Marco
Pasi, Kocku Von Stuckrad. Leiden-Boston:
Brill, 2010.
Peña y Troncoso, Gonzalo. El Dosamantismo es la Religión Científica en oposición al
Ocultismo Semita, que es una Liga de Internacional Anarquismo. La Síntesis
Científico-Religiosa del maestro Jesús Ceballos Dosamantes.
Ciudad de México: Editores J. I. Guerrero y Cía., Sucs.
de F. Díaz de León, 1904.
Pérez Monfort, Ricardo. “El doctor Arnold Krumm Heller
en México, 1910-1935. Entre el esoterismo, el nacionalismo y la osmoterapia”. En Cotidianidades,
imaginarios y contextos: Ensayos de historia y cultura en México, 1850-1950.
Ciudad de México: Ciesas, 2008.
Pérez Monfort, Ricardo. “El Dr. Arnold Krumm-Heller. Un extraño
ejemplo de alemán en México entre el esoterismo, el nacionalismo y la osmoterapia”. En La
comunidad alemana en la ciudad de México. Editado por Brígida von Mentz. Ciudad de México: Instituto de Cultura de la Ciudad
de México, 1999.
Pérez Montfort, Ricardo. “Un nacionalismo sin
nación aparente (La fabricación de lo "típico" mexicano 1920-1950)”. Política y Cultura 12 (1999): 177-193.
Pérez Vejo, Tomás. "Raza y construcción nacional.
México, 1810-1910". En Raza y política en Hispanoamérica. Editado por Tomás Pérez Viejo y Pablo
Yankelevich. Ciudad de México: Bonilla
Artigas Editores, 2017.
Peryt Shou. Konzentration und Wille: ihre Schulung
auf Grundlage der Logos-Lehre
von PerytSchu, herausgegeben
und bearbeitet von Dr. A. Krumm-Heller. Halle: Dr. A. Krumm-Heller Verlagsanstalt, 1919.
Pineda Gómez, Francisco. Ejército
Libertador: 1915. Ciudad de México: Ediciones Era, 2014.
Orozco y Berra, Fernando. Por qué
callamos. Ligera exposición de razones a la Junta Central Permanente del
Segundo Congreso Espirita y a los espiritistas en general. Ciudad de México,
1909.
Ribera Carbó, Anna. La Casa del Obrero Mundial: anarcosindicalismo y revolución en México.
Ciudad de México: Instituto Nacional de Antropología e Historia, 2010.
Starr, Martin P. “Aleister
Crowley—Freemason?!”. En Aleister Crowley and Western Esotericism. Editado
por Henrik Bogdan y Martin P. Starr. Oxford: Oxford
University Press, 2012.
Staudenmaier, Peter. Between Occultism and Nazism:
Anthroposophy and the Politics of Race in the Fascist Era. Leiden-Boston: Brill, 2014.
Tedín de Tognetti, Teresa. Catálogo
de la Exposición “Xul Solar: visiones y
revelaciones”. Buenos Aires: MALBA, 2005.
Toffoli de
Mateos, Myrta. “Las primeras farmacias en La Plata”. Acta Farmacéutica Bonaerense 1, no. 2 (1982):
135-140.
Tortolero Cervantes, Yolia. “El espiritismo seduce a
Francisco I. Madero”. Tesis de doctorado, Senado de la República de México,
2004.
Urban, Hugh. Magia Sexualis: Sex, Magic, and Liberation in Modern Western
Esotericism. Berkeley-Los
Angeles-London: University of California Press, 2006.
Urban, Hugh. Tantra:
Sex, Secrecy, Politics, and Power in the Study of Religion. Berkeley-Los
Angeles-London: University of California Press, 2006.
Urban, Hugh. “The Yoga of Sex: Tantra, Orientalism,
and Sex Magic in the Ordo Templis Orientis”. En Hidden
Intercourse: Eros and Sexuality in the History of Western Esotericism. Editado por Wouter
J. Hanegraaff y Jeffrey John Kripal.
Leiden-Boston: Brill, 2008.
Von Feilitzsch, Heribert. Maestro de espías en México: Félix A. Sommerfeld
1908-1914. Ciudad de México: Grupo Planeta, 2016.
Von Feilitzsch, Heribert. “Medical doctor, Occultist, Revolutionary, Spy:
Arnold Krumm-Heller and the Mexican Revolution”. En Equestrian Rebels: Critical Perspectives on
Mariano Azuela and the Novel of the Mexican Revolution. Editado
por Roberto Cantú. Cambridge:
Cambridge Scholars Publishing, 2016.
[1] Entre
los pocos trabajos académicos dedicados exclusivamente al personaje se
encuentra un capítulo que José Ricardo Chaves le dedica en su libro, el cual
ofrece un análisis de su obra libresca con relación a la literatura ocultista
de la época. José
Ricardo Chaves, México heterodoxo: diversidad religiosa en las letras del
siglo XIX y comienzos del XX (Ciudad de México: Bonilla Artigas, 2013),
181-191.
Ricardo Pérez Montfort analiza el esoterismo de Krumm-Heller con relación al nacionalismo mexicano de la
época en base a algunas fuentes de archivo de México. Ricardo Pérez Montfort, “El doctor Arnold Krumm Heller en México,
1910-1935. Entre el esoterismo, el nacionalismo y la osmoterapia”,
en Cotidianidades, imaginarios y
contextos: Ensayos de historia y cultura en México, 1850-1950 (Ciudad de México:
Ciesas, 2008), 249-274 y “El Dr. Arnold
Krumm-Heller. Un extraño ejemplo de alemán en México
entre el esoterismo, el nacionalismo y la osmoterapia”,
en La comunidad alemana en la ciudad de
México, ed. Brígida von Mentz (Ciudad de México:
Instituto de Cultura de la Ciudad de México, 1999). El libro que el
investigador suizo Peter-Robert König dedica a Krumm-Heller se basa exclusivamente en su relación con la
Ordo Templis Orientis,
objeto de estudio original del autor, y las derivas de la FRA luego de su
muerte en 1949. Peter-Robert König, Ein Leben für die Rose (Arnoldo Krumm-Heller)
(München: ARW, 1995). Por último, Heribert von Feilitzsch se ha ocupado de estudiar al jefe de espías
alemanes en México, Felix A. Sommerfeld,
y ha publicado un capítulo sobre las actividades de espionaje de Krumm-Heller en torno a esta figura. Heribert von Feilitzsch, “Medical doctor, Occultist, Revolutionary, Spy:
Arnold Krumm-Heller and the Mexican Revolution”, en Equestrian
Rebels: Critical Perspectives on Mariano Azuela and the Novel of the Mexican
Revolution, ed. Roberto Cantú (Cambridge: Cambridge Scholars
Publishing, 2016), 287-305.
[2] Este
artículo es un primer avance de mi investigación de tesis doctoral sobre Arnold Krumm-Heller realizada en
la Université de Lausanne,
Suiza y École Pratique des
Hautes Études, Francia. Los avances fueron
presentados y discutidos en “Arnold Krumm-Heller ‘Huiracocha’ y
Francisco Madero: mesianismo político en vísperas de la Revolución”, XXI Encuentro de la Red de Investigadores
del Fenómeno Religioso en México, Centro histórico de Oaxaca, 20 de abril
de 2018, y en “Arnold Krumm-Heller:
esoterismo y política en el México revolucionario. Avances y problemas de
investigación”, Programa de maestría y doctorado en Letras, Universidad
Nacional Autónoma de México, 24 de abril de 2018. Agradezco al Dr. José Ricardo
Chaves Pacheco por sus comentarios en ésta última jornada.
[3] Marco
Pasi, "Oriental Kabbalah and the Parting of East
and West in the Early Theosophical Society", en Kabbalah
and Modernity: Interpretations, Transformations, Adaptations, ed. Boaz Hus,
Marco Pasi y Kocku Von Stuckrad (Leiden-Boston: Brill, 2010), 157. Wouter J. Hanegraaff,
“Esotericism Theorized: Major Trends and Approaches to the Study of
Esotericism”, en Religion: Secret Religion,
ed. April D. DeConick (San Francisco: Macmillan,
2016). Kennet Granholm, “Locating the West:
Problematizing the Western in Western Esotericism and Occultism”, en Occultism in
Global Perspective, eds. Henrik Bogdan y Gordan Djurdjevic
(London: Equinox Publishing ltd, 2011); Egil Asprem, “Beyond the West: Towards a New Comparativism
in the Study of Esotericism”, Correspondences
2, no. 1 (2014): 3-33. Wouter Hanegraaff, “The Globalization of Esotericism”,
Correspondences 3 (2015): 55-91.
[4] Eduardo
Devés Valdés, El pensamiento latinoamericano en el siglo XX: Del Ariel
de Rodó a la CEPAL (1900-1950) (Buenos Aires: Biblos, 2000),
42.
[5]
Germany, Births and Baptisms, 1558-1898. Salt Lake City, Utah: Family search,
2013, GHL film number 594903.
[6] Karl
B. Heller, Reisen in Mexiko in den jahren 1845-1848 (Leipzig: W. Engelmann, 1853).
[7]
Passengers departing from Hamburg, February 1893, Microfilm number K 1748, SH.
[8] Arnold Krumm-Heller, Conferencias esotéricas (México:
Ediciones Botas, 1950), 6.
[9] Krumm-Heller tuvo cuatro esposas y cinco hijos: la chilena
Rita Aguirre Valéry, con quien tuvo a Hiram Krumm
Aguirre; la mexicana María Gilda Mejía Ávila, con quien tuvo un bebé fallecido
al nacer y luego a Arnoldo Krumm Heller
Mejía, también doctor y coronel en el ejército mexicano; la alemana Carlota Neuman, quien lo acompañaría en sus misiones de espionaje
junto a su hijito Parsival, Guadalupe Krumm y Cuauhtémoc Sieglinde; y
la alemana que dejará viuda en 1949, María Luisa Elizabeth Frieda Julie Von Diringshofen.
[10] Myrta Toffoli de Mateos. “Las primeras
farmacias en La Plata”, Acta Farmacéutica
Bonaerense, vol. 1, no 2, 1982, 137. Girgois
había fundado la Escuela de Estudios Herméticos en Buenos Aires, La Plata y
Santiago del Estero y estaba a cargo de la Logia n° 20 de La Plata. BML, Fond Papus, Ms 5486. Correspondance. Étranger. Argentine (44 feuilles).
[11] Krumm-Heller, Conferencias
esotéricas, 11.
[12] Henri
Girgois, L'occulte chez les aborigènes de l'Amérique du Sud (Paris: Chamuel
éditeur, 1897). Fue traducida al español
aunque con importantes imprecisiones: Henri Girgois, El oculto entre los aborígenes de la América
del Sud. Los quichuas raza ariana (Barcelona:
Establecimiento Tipográfico de Juan Torrents y
Corral, 1901). Esta obra es de capital importancia no sólo para comprender la
elección del nombre espiritual “Huirarocha” por Krumm-Heller sino para la lectura esotérica del pasado
prehispánico que en general realizarán muchos esoteristas
latinoamericanos. Entre los cursos dictados por su Escuela Hermética en Buenos
Aires se encuentran, por ejemplo, “Nociones generales de ocultismo en el pasado
y el presente, especialmente en los países hispano-americanos
del sur” o “Plantas sagradas, su uso en la América del Sur” a cargo de Dr.
Amauta. BML, Fond Papus, Ms
5486. Correspondance. Étranger.
Argentine (44 feuilles).
Puede verse un análisis sobre esta obra de Girgois y
el sobrenombre “Huiracocha” en mi ponencia: “Arnold Krumm-Heller ‘Huiracocha’ y Francisco Madero”.
[13] Arnold Krumm-Heller, “El Zodíaco
de los Incas en comparación con el de los Aztecas”, Actas del XVII Congreso Internacional de Americanistas, México,
1910.
[14] Pérez
Montfort, “El Dr. Arnold Krumm-Heller”, 254.
[15]
AHSDN, Expediente X1/111/4-3357, f. 10.
[16]
AHGE-AHD, H/510(C4) (43-0) “918-19”/1, Exp. 30-16-65, f.110.
[17]
BML, Fond Papus, Ms 5486. Correspondance. Étranger. Mexique (4 feuilles).
[18]
AHSDN, Exp. X1/111/4-3357, f.208.
[19] Yves Hivert-Messeca y Aldo Mola. L’Europe
sous l’acacia: Histoire des Franc-maçonneries européennes du XVIIIe siècle à nos jours. Tome 2: le
XIX siècle (París: Dervy,
2016), 444.
[20] Arnold
Krumm-Heller, Osmologische Heilkunde: Die Magie der Duftstoffe (Berlin:
Schikowski, 1955). Arnold Krumm-Heller,
Del incienso a la osmoterapia
(Santiago de Chile: Editorial Cultura, 1936).
[21] El
nexo con México será permanente y Krumm-Heller le
enviará a Papus a los mexicanos interesados en
sumarse a su Escuela, como por ejemplo a un tal Ricardo Prieto. BML.
Fond Papus. Ms 5486. Correspondance. Étranger. 17 Italie. Dr Krum Heller (2 feuilles)
[22] El
trabajo más exhaustivo y mejor documentado sobre los orígenes de la OTO es el
libro de Richard
Kaczynski, Forgotten Templars: The Untold Origins of Ordo Templi Orientis
(Richard Kaczynski, 2012). Pueden
consultarse también los tres tomos de Peter König. Peter-Robert
König, Der OTO-Phänomen-Reload (München: ARW, 2011).
[23] Esta
tradición de Menfis-Misraim que Krumm-Heller
introdujo en Latinoamérica será replicada por sus discípulos. Por ejemplo, Samael aun Weor quien fundó su
propio Summum Supremum
Sanctuarium en plena selva colombiana (Marcelo
Campos, “Esoterismo ocidental em
terras latinoamericanas: notas sobre o Movimento Gnóstico de Samael Aun Weor”, REHMLAC+
8, no. 1 (2016): 26, http://dx.doi.org/10.15517/rehmlac.v8i1.24283).
[24] Marco
Antonio Flores Zavala, “La masonería en el centro-norte de México, 1869-1914”, REHMLAC+ 6, no. 1 (mayo-noviembre 2014):
120, https://revistas.ucr.ac.cr/index.php/rehmlac/article/view/15229/14528;
Carlos Francisco Martínez Moreno, “Coaliciones y traiciones masónicas. De la
primera reelección de Porfirio Díaz a los inicios de la revolución mexicana,
1887-1911”, REHMLAC+ 7, no. 2 (diciembre
2015-abril 2016): 259, http://dx.doi.org/10.15517/rehmlac.v7i2.22853
[25] “Que
el portador de esta credencial es nuestro hermano el ciudadano mexicano,
Caballero Kadosh, poseedor de la escuadra de oro con
cinta azul, coronel doctor Arnoldo Krumm Heller, nuestro respetable Gran Maestro de la Muy
Respetable Gran Logia Valle de México, quien por estar investido de la más alta
magistratura de la Masonería Mexicana tiene poder legal amplio y absoluto para
establecer y firmar pactos con otras Grandes Logias del Orbe”. Firmado por el
Gran Maestre saliente Eusebio Sánchez, diputado Manuel F. Bustos y gran
secretario Alberto Pro. Carta Credencial (1916-1917) de la Gran Logia de
Antiguos, Libres y Acetados Masones “Valle de
México”. Archivo de la Antiqua Orden Masónica de los
Ritos Egipcios de Memphis Misraim.
[26]
Martin P. Starr, “Aleister Crowley—Freemason?!”, en Aleister Crowley
and Western Esotericism, eds. Henrik
Bogdan y Martin P. Starr (Oxford: Oxford University Press, 2012).
[27]
Campos, “Esoterismo ocidental”, 26.
[28] Hernán
Facundo López, “José López Rega, ‘El Brujo’”, en Estudios sobre la historia del Esoterismo
Occidental en América Latina: enfoques, aportes, problemas y debates, eds. Bubello, Chaves y Francisco de Mendonca
Junior (Ciudad de México-Buenos Aires: Facultad de Filosofía y Letras de la
UBA-Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM, 2017), 298.
[29]
Urban Hugh. “The Yoga of Sex: Tantra, Orientalism, and Sex Magic in the Ordo Templis Orientis”, en Hidden
Intercourse: Eros and Sexuality in the History of Western Esotericism, eds. Wouter
J. Hanegraaff y Jeffrey John Kripal
(Leiden-Boston: Brill, 2008), 404. Sobre la magia sexual véase: Hugh
B. Urban, Magia Sexualis:
Sex, Magic, and Liberation in Modern Western Esotericism (Berkeley-Los
Angeles-London: University of California Press, 2006). Para la introducción del tantra en occidente: Urban,
Tantra: Sex, Secrecy, Politics, and Power in the Study of Religion
(Berkeley-Los Angeles-London: University of California Press, 2003). Sobre la Hermetic Brotherhood of
Luxor el mejor trabajo sigue siendo: Joscelyn Godwin, The
Hermetic Brotherhood of Luxor: Initiatic and
Historical Documents of an Order of Practical Occultism (York Beach: Weiser
Books, 1995).
[30]
Arriba las principales corrientes en las que abreva Krumm-Heller
y subrayados sus cinco proclamados maestros. Abajo algunos líderes nacionales
de la FRA con algunas relaciones y derivas posteriores.
[31] Huiracocha Dr. Krumm Heller. No fornicarás
(Ciudad de México: Librería de la Vda. De Ch. Bouret,
1912), 25. CONDUMEX, Biblioteca Espiritista de Madero, 133 HUI. Krumm-Heller menciona a la Hermetic
Brotherhood of Luxor en el
documento, dando a entender que sus secretos son aún desconocidos: “el problema
es muy poco estudiado y divulgado por los propios ocultistas. Sin embargo,
existe ‘Los hermanos herméticos de Luxor’ que se
reparten manuscritos entre sus afiliados que contienen grandes secretos y por
los cuales se obtienen misteriosos poderes”. En efecto, sus prácticas de magia
sexual son sustancialmente diferentes a las de Pascal Beverly Randolph, para quien tanto hombre como mujer debían tener
un rol activo y alcanzar ambos el orgasmo. Urban, The yoga of sex, 415. Para Krumm-Heller en cambio sólo es el semen el vehículo astral
y el hombre el hacedor de la magia. El fin del ritual sexual de Krumm-Heller es el mismo que el de la OTO, convertirse en
dios u obtener algún fin mundano práctico, pero se diferencia también de éste
en el sentido de que no busca la liberación sexual ni la violación exagerada de
convenciones sociales sino la moderación, más a tono con la moral del maderismo. En los dos rituales que produjo para la FRA y la
Misa Gnóstica tampoco intervienen prácticas sexuales como sí en los de Thelema.
[32] Esta
relación de intimidad se mantendrá a lo largo de los años. Por ejemplo, cuando
Sara regrese a México en 1915 será Krumm-Heller quien
la recoja en su automóvil y le de alojamiento. HNM, The Mexican Herald,
25 de octubre de 1915.
[33] Heribert Von Feilitzsch, Maestro
de espías en México: Félix A. Sommerfeld 1908-1914
(Ciudad de México: Grupo Planeta, 2016), 5.
[34] Friedrich
Katz, The Secret War in Mexico: Europe, the United States, and the Mexican
Revolution (Chicago: University of Chicago Press, 1981), 87.
[35]
AHSDN, Exp. X1/111/4-3357, f.113.
[36] AGN,
Fondo Francisco I. Madero /Caja 028 (740 – 773-3)/99550/36/Expediente
752.
[37]Arnold
Krumm-Heller, Carranzas Mexiko:
Gesammelte Abhandlungen über das Land der Azteken
(Berlin: Otto Thiele, 1917).
[38] Yolia Tortolero Cervantes, “El
espiritismo seduce a Francisco I. Madero” (Tesis doctoral, Senado de la República,
2004), 102.
[39]
Publicada en alemán en 1919 en Halle y español en 1925 en Barcelona, con
notables diferencias que veremos. Krumm-Heller, Der Rosenkreuzer
aus Mexiko: Okkultischer Roman (Halle: Dr Krumm-HellerVerlagsanstalt,
1919); Krumm-Heller, Rosa-Cruz: Novela de ocultismo iniciático (Barcelona: Maucii,
1925).
[40] Krumm-Heller, Conferencias
esotéricas.
[41]
Fernando Orozco y Berra, Por qué
callamos. Ligera exposición de razones a la Junta Central Permanente del
Segundo Congreso Espirita y a los espiritistas en general (México, 1909),
38-40. A pesar de su postura, Fernández Güell tendría a Krumm-Heller
en suma estima, calificándolo de “infatigable” y felicitándolo por su obra de
teatro teosófica “La ley del karma” y “Los tattwas y
su importancia en la vida práctica”. Helios,
Núm. 6, Tomo VII, México, octubre de 1912, 152-153. Juntos formaron parte del
comité directivo de la Gran Liga de Librepensadores en 1912. Entre lo que quedó
de la biblioteca de Krumm-Heller de Mixcoac, destruida
por los zapatistas durante sus misiones en Estados Unidos en 1916, se encuentra
“Hipnotismo y Espiritismo: Estudio médico-crítico” de José Lapponi
de 1907, regalo del costarricense.
[42]
Alberto de Sarak fue el director del “Centro
esotérico oriental de Francia” en París. Junto a Barlet
(1838-1921) organizaron la Sociedad Teosófica en Francia y la Orden Cabalística
de la Rosa Cruz con Joséphin
Péladan, Stanislas de
Guaita, Papus, Paul Adam y Charles Melinge. Sarak decía haber nacido
en el Tibet, ser el hijo de un Rajá y una marquesa
francesa y haber sido instruido por los Mahatmas del Tibet.
Su verdadero nombre era Alberto Santini-Sgaluppi, medium italiano y prestidigitador, acusado de fraude en
Italia, Bélgica, Francia y España y expulsado dos veces de la Sociedad
Teosófica. Como General Inspector del Supremo Concilio de la Orden de los
Iniciados del Tibet se dedicó a fundar “Centros
Esotéricos Orientales” en toda Latinoamérica, obteniendo cuantiosos ingresos de
sus demostraciones públicas y efímeras publicaciones. En 1899 funda “La Verdad”
en Valparaíso de sólo 3 números, “El Loto” en Lima en 1900 y “La Luz” en el
Centro Esotérico Mexicano que vio sólo dos números.
[43] HNM, El Imparcial, 14 de noviembre de 1908; El Tiempo, 19 de febrero de 1909 y 13 de
octubre de 1909.
[44] HNM, La voz de México y El Tiempo, 21 de agosto de 1903.
[45] En
una carta del 9 de mayo de 1916 Sarak le menciona a Papus que obtuvo el cargo de cónsul al abandonar París, y
que trabajó en Lausana con una gran casa de automóviles exportadora a la
América del Sur. BML, Fond Papus,
Ms 5486. Correspondance. Étranger.
Argentine (44 feuilles). Martínez
Moreno, “Coaliciones y traiciones masónicas”, 249.
[46] HNM, La Patria, 18 de diciembre de 1903, 10
de enero de 1904, 14 de enero de 1904, 7 de marzo de 1906, 12 de agosto de
1911.
[47]
Ceballos Dosamantes escribió varias obras con la
pretensión de hacer una síntesis filosófica “positiva” entre la ciencia y la
religión, contra el materialismo, el catolicismo y el ocultismo, y contra lo
que llamó la “mistificación maderista”. En su época tuvo varios detractores y
fue defendido por su discípulo Gonzalo Peña y Troncoso, quien publicó una
recopilación de sus conferencias y publicaciones. Jesús Ceballos Dosamantes, El
perfeccionamiento absoluto. Bases fundamentales de un nuevo sistema filosófico
(México: Imprenta de Eduardo Dublán, 1888); Ceballos Dosamantes, Fariseos
y Saduceos modernos. (Místicos y materialistas) (México: Tipografía de Dublán y Compañía, 1889); Ceballos Dosamantes,
Ciencia y religión del porvenir. Solución
a los grandes problemas (México: Eduardo Dublán
Impresor, 1897); Ceballos Dosamantes, La gran mistificación maderista. Jesuitas y pseudo-científicos ante la moral y la ciencia (México:
Imprenta de A. Carranza e Hijos, 1911). Gonzalo Peña y Troncoso, El Dosamantismo es
la Religión Científica en oposición al Ocultismo Semita, que es una Liga de
Internacional Anarquismo. La Síntesis Científico-Religiosa del maestro Jesús
Ceballos Dosamantes (México: Editores J. I.
Guerrero y Cía., Sucs. de F. Díaz de León, 1904).
[48] HNM, La Patria, 12 de agosto de 1904. En 1888
Péladan había cofundado con Stanislas
de Guaita la Orden Cabalística de la Rosa-Cruz.
Poniendo como pretexto la refutación de la magia operativa, se separa
efectivamente del grupo en 1891 para fundar la Orden Rusacruz
Católica y Estética del Templo y del Grial.
[49] El 19
de enero Madero escribe al Centro Esotérico Mexicano diciendo que su director
Emilio Calvayrae es su amigo, y que por favor lo
suscriban a la revista “La luz” fundada por Sarak y
le envíen libros de “budismo oriental”. PN, Archivo Histórico Francisco I.
Madero, Epistolario, T. 1 (1900-1909), 68. Por su parte, Sarak
también menciona a Madero como “uno de sus buenos amigos mexicanos a quién le
hablé de mis experiencias” y que su cargo de cónsul en Suiza terminó luego de
su asesinato. BML, Fond Papus,
Ms 5486. Correspondance. Étranger.
Argentine (44 feuilles).
[50] Krumm-Heller, Conferencias
esotéricas, 51.
[51] HNM, El Mañana, 12 de marzo de 1912.
[52]
AHSDN, Exp. X1/111/4-3357, f.208. Charles
C. Cumberland, Madero y la revolución mexicana (México: Siglo XXI,
1977), 177.
[53] BNM,
Colección Archivos y Manuscritos, AMA Ms.M/T.1088
c.10.
[54]
AHGE, Exp. I/131/1664, Legajo 3-19-2 (II), f.
[55]
AHSDN, Exp. X1/111/4-3357, f.208
[56]
AGPJ, Exp 3461.
[57] AHGE,
III/534.2 (42)/4, Exp.
9-4-44.
[58]
Manuel González, Con Carranza. Episodios
de la Revolución Constitucionalista 1913-1814 (México: Instituto de las
Revoluciones de México, 2015), 233 y 401.
[59] Carta
Patente en: CONDUMEX, Manuscritos del General Manuel Willars
González, 1901-1961, Fondo: LXVIII-1.21.2956.2-3
[60]
Diploma en: CONDUMEX, Manuscritos del General Manuel Willars
González, 1901-1961, Fondo: Fondo: LXVIII-1.21.2956.1-3. Ya Henri Girgois, como oficial del ejército argentino, recomendaba
en 1899 iniciar primero a los oficiales que a los soldados. BML, Fond Papus, Ms 5486. Correspondance. Étranger. Argentine (44 feuilles).
[61]
CONDUMEX, Manuscritos del General Manuel Willars
González, 1901-1961, Fondo: LXVIII-1.21.2960.1
[62] Francisco
Pineda Gómez, Ejército Libertador: 1915 (México: Ediciones Era, 2014),
355.
[63]
AHSDN, Expediente X1/111/4-3357, f. 92.
[64]
CONDUMEX, Manuscritos del General Manuel Willars
González, 1901-1961, LXVIII-1.16.2391.1. AHPM, Caja
2992, Exp. 11588.
[65] Jonathan
Charles Brown, Petróleo y revolución en México (México: Siglo XXI,
1998), 231.
[66] Anna
Ribera Carbó, La Casa del Obrero Mundial:
anarcosindicalismo y revolución en México (México: Instituto Nacional de
Antropología e Historia, 2010), 19.
[67] HNM, The Mexican Herald, 13 de septiembre de 1913.
[68] NA,
Old Mexican Files 1909-1921, Case No. 531.
[69] El
episodio es relatado por un periodista norteamericano, John Roberts, tras una
entrevista con un oficial carrancista. NA, Old German Files 1909-21, Case Subject Arnoldo Krumm-Heller,
8000-1786.
[70] Carbó, La Casa del Obrero Mundial, 170.
[71] Belinda
Arteaga Castillo, La escuela racionalista de Yucatán: una experiencia
mexicana de educación anarquista (1915-1923) (México: Universidad
Pedagógica Nacional, 2005).
[72] “Reportazgo acerca de la inauguración de la Escuela
Racionalista de América, por el Dr. Krumm Heller, fundada por los obreros de la Casa del Obrero
Mundial”. Isidro Fabela, Josefina E. de Fabela, Documentos históricos de la Revolución Mexicana XVI,
Revolución y Régimen Constitucionalista, Volumen 4°, Tomo I (México:
Editorial Jus S. A, 1969) 308-315.
[73] HNM, El Demócrata: diario constitucionalista,
21 de septiembre de 1915.
[74] AHGE,
AEMEUA-478-3.
[75]
AHSDN, Expediente X1/111/4-3357, f. 4
[76]
AHSDN, Expediente X1/111/4-3357, f. 324. Krumm-Heller
dice haber obtenido originalmente su título de “Médico Fisioterapeuta” en Dresden en el “Instituto alemán para fisioterapia” el 1 de agosto
de 1912 otorgado por el profesor Maximo Lindmar y su Director Dr Makulls.
[77] AHSDN,
Expediente X1/111/4-3357, f. 6.
[78]
LC, “British search trunk of mexican diplomat”, The Washington Herald, 14th
September 1916.
[79] Arnold
Krumm-Heller, Für Freiheit
und Recht: meine Erlebnisse aus dem mexikanischen Bürgerkriege (Berlin: Otto Thiele, 1917).
[80] Arnoldo
Krumm-Heller, Mexiko, mein
Heimatland!:
Gesammelte Abhandlungen über das Land der Azteken
(Halle: Krumm-Heller, 1919).
[81]
Brief von Hermann Oberle (Buenos Aires) an Karl Heise vom
14. März 1930. GSPK, I. HA Rep. 238 TG, Karton 67.
[82] Peryt Shou,
Konzentration und Wille: ihre Schulung auf Grundlage der Logos-Lehre von Peryt Schu, herausgegeben
und bearbeitet von Dr. A. Krumm-Heller (Halle:
Dr. A. Krumm-Heller Verlagsanstalt, 1919)
[83]
NA, Bureau Section Files, 1909-21, 90755-196, German agent and Mexican matter,
Suspect Name: Krum Heller, Roll number 913.
[84] AHGE,
Exp. 11-4-23.
[85]
AHSDN, Expediente X1/111/4-3357, f. 22 y 25.
[86]AHSDN,
Expediente X1/111/4-3357, f. 25.
[87] Entre
sus propuestas al gobierno mexicano que se rescatan de sus informes a la
Secretaría de Relaciones Exteriores se encontraron: el acuerdo de Universum Film AG –la industria cinematográfica alemana más
poderosa de la época de Weimar- para conceder gratis al Gobierno Mexicano todo
el material de enseñanza fílmica en exhibiciones públicas, a cambio de ayudarle
a exhibir en México las grandes películas culturales que se fabrican en Berlín;
la instalación de submarinos alemanes en el Golfo de México y la construcción
de cascos de acero y brazos y piernas artificiales; Krumm-Heller
compra en Alemania una fábrica para producir aire líquido para explosivos con
contrato para instalarla en México, con la cláusula de obsequiarle parte al
gobierno y donde “los obreros serán sólo mexicanos”; el proyecto de 1.500 ex
oficiales de la marina alemana, cada uno con capital, dispuestos a comprar
terrenos y ocuparse de faenas agrícolas (el anhelado proyecto migratorio
presentado a Madero en 1912). Para esto Krumm-Heller
ofrece su propio peculio y un capital de 400.000 marcos que ofrece su aliado
Von Bredow de Tlacotalpam
con quien dice tener sociedad. La oferta fue finalmente aceptada por el ministro
Villareal para vender tierras a cuatrocientos alemanes cerca del lago de
Chapala. Cfr. “Informes políticos de la legación de México en Alemania rendidos
por el comisionado a la mencionada legación ciudadano Doctor Arnoldo Krumm Heller durante el año de
1917”, AHGE, Exp. 11-4-23. 92 folios.
[88] Por
ejemplo, Krumm-Heller pidió al gobierno mexicano
publicar trabajos sin autorización previa, publicando de ese modo su novela “Hertha” sobre una prostituta de Hamburgo que se “regenera”
espiritualmente en México. El encargado Leopoldo Ortiz se queja de que algunas
de sus obras le traen poco provecho a México y que “se hubiera buscado un
escritor mexicano y traducirla al alemán, o usado un libro de Gamboa, Sánchez
Mármol o Rabasa para el objeto”. AHGE, 3-19-2 (I).
“Se hubiera
buscado un escritor mexicano y traducirla al alemán, o usado un libro de
Gamboa, Sánchez Mármol o Rabasa para el objeto”.
[89] PAAA,
RZ 201, R 16916.
[90]
AHSDN, Exp. X1/111/4-3357, año 1969, f. 134.
[91]
AHSDN, Exp. X1/111/4-3357, año 1969, f. 453.
[92] AHGE,
Exp. 3-19-2 (I), f- 171.
[93]AHGE,
Exp. 3-19-2 (I), f. 175.
[94]
König, “Eine Leben für die Rose”, 27.
[95]
Teresa Tedín de Tognetti,
“Cronología”, en Catálogo de la
Exposición “Xul Solar: visiones y revelaciones”
(Buenos Aires: MALBA, 2005).
[96] Ana
Pacheco Vigne, “Plenitud de Amado Nervo: ¿prosa
aforística o poemas en prosa?”, Literatura
Mexicana XVI, no. 1 (2005): 48. Chaves,
México heterodoxo, 50-55.
[97] AHGE,
3-19-2 (II), exp 900 “Propaganda contra México”.
[98] Campos,
“Esoterismo occidental”, 42
[99] Si
bien no se conocieron personalmente, Jinarajadasa elogió a Krumm
Heller en España, mientras que el doctor alemán
afirmará que el teósofo hace giras por Latinoamérica, pero “no sabe nada de la
simbología de la América”. Revista
Rosacruz 1, no. 3.
[100] Chaves,
“La pérdida de la Estrella. La gira de Krishnamurti
por América Latina en 1935”, en Estudios
sobre la historia del Esoterismo Occidental en América Latina, 188.
[101]
Archivo de la Sociedad Teosófica de Costa Rica. Folder de correspondencia
enviada 1930, Secretaría General de la Sección Centroamericana de la Sociedad
Teosófica. Carta circular de Mariano Coronado. 10 de enero de 1930. Agradezco a
Esteban Rodríguez Dobles el aporte de este documento desde Costa Rica.
[102] Bubello, Historia del
esoterismo en Argentina (Buenos Aires: Biblos, 2010),
93.
[103] En el
primer número de la revista Rosacruz
de 1934 se cuestionaban ya tres liderazgos: 1) Krishnamurti,
de quien se afirmaba él mismo declaró que no había tal mesías; 2) la
organización Suddha Dharma Mandalam, la que anunció también que entre sus adeptos
surgiría el Redentor del mundo; y 3) “Raumsol”, quien
en 1931 ya afirmaba que él era el único Maestro. En números posteriores se
cuestionó permanentemente a discípulos que irían surgiendo y pretendiendo
continuar la tradición Huiracocha: círculo “Exito Mental” de Chile, un grupo de Cali liderado por un
tal Pino, Raumsol quien se declaró Redentor del
Mundo. Revista Rosacruz 2, no. 13 (noviembre
1936).
[104] König, Eine Leben für die Rose, 33.
[105] PAAA,
RZ 214, R 98732. Pérez Montfort, El doctor Arnold Krumm-Heller,
251.
[106] KAA,
CMO-64-D-01.
[107] La Nouvelle Église Gnostique Universelle fue
fundada por Jules Doinel en 1889, cuyo objetivo
original fue crear una elite masónica bajo el signo espiritual de la gnosis. Su
sucesor Joanny Bricaud la
volvió iglesia oficial de la Orden Martinista tras un
acuerdo con Papus y creó en 1912 los “legados
gnósticos”. Uno de ellos fue Theodor Reuss, legado
para Suiza, quien creó su propia “Iglesia Gnóstica Católica”, como brazo
eclesiástico de la OTO, e incorporó la “misa gnóstica” escrita por Crowley en 1918 con las técnicas de magia sexual como modo
de alcanzar la inmortalidad. Krumm-Heller era
heredero de esta línea a través Christian M. Peithmann
(1868-1943) y escribió su propia misa gnóstica, que enseñaba la retención del
semen como acto mágico fundamental. Massimo Introvigne, Il ritorno dello gnosticismo (Carnago: Sugar Co Edizioni, 1993), 96-125.
[108] König,
Der OTO-Phänomen-Reload.T3, 317.
Para la campaña nazi contra
el ocultismo Peter
Staudenmaier, Between Occultism and Nazism: Anthroposophy and the Politics
of Race in the Fascist Era (Brill, 2014), 214-247.
[109] Pasi, "Oriental Kabbalah",
442.
[110] “He
empezado citando las doctrinas orientales, más no pienso detenerme en ellas,
pues la evolución que han sufrido adaptándose a los diferentes medios sociales
en donde se han agitado, es bastante notable y por otra parte su adaptación
entre nosotros forma lo que se llama esoterismo occidental o Kabala, que no es otra cosa sino un sistema filosófico cuyo
origen se confunde con el del pueblo hebreo y encierra la doctrina secreta que
forma el fondo de todos los dogmas religiosos del mundo” (Krumm-Heller,
“Conferencias esotéricas”, 27).
[111] Curso
Esotérico de Magia Rúnica del maestro Huiracocha (Arnold Krumm Heller),
en Las Enseñanzas de la Antigua
Fraternidad Rosacruz (Málaga: Editorial Sirio, 1987). El “Curso de cábala”
que Krumm-Heller ofrecía se trataba de un curso de
“cábala ario-egipcia” que venía con el “Deutsches
Original Tarot” publicado por A. Frank Glahn
(1786-1941), conocido como “Tarot Glahn”, “Tarot Hermann Bauer” (por quien lo publicó) o “Tarot Hans
Schubert” (por el artista diseñador). Krumm-Heller lo
llama “Tarot Nórdico” mencionando que hay diferentes cábalas, pero la principal
es la “Cábala aria o nórdica” que es la que conocieron los egipcios y que está
vinculada con los antiguos mayas. En la portada de sus “Cursos por correspondencia”
se dice que “El Tarot Ario-egipcio es el perpetuador de nuestra propia
tradición occidental”. Cursos por
correspondencia de la Fraternitas Rosacruciana Antiqua, con sede en Berlin-Heiligensee-Alemania dictados por su Comendador para Hispano-América.
[112] Esto
será retomado por discípulos latinoamericanos como el político argentino José
López Rega con su “Alpha y
Omega. Novela iniciática” de 1963, donde es un tal “Gabriel” el que transmite
el conocimiento oculto de los aztecas. Para el ideólogo de la dictadura
argentina y fundador de la Alianza Anticomunista Argentina, Asia, África y
América Latina conformaban “el triángulo escaleno de la triple A, una fuente
energética que consolidará al tercer mundo”. López, José López Rega, 304-306.
[113] En
estas operaciones la ariosofía jugó un rol central en
Krumm-Heller al aportar la idea de que las supuestas
razas indoarias estaban vinculadas con las mesoamericanas, complejo tema que trabajaremos
en otro artículo. Nicholas
Goodrick-Clarke, The Occult Roots of Nazism: The Ariosophists of Austria and Germany 1890-1935 (Wellingborough: Aquarian Press, 1985).
[114] La
modificación más notoria fue el agregado de los tres capítulos finales que
transcurren en España y la aparición del santo grial en el Monasterio de
Montserrat, traslado al imaginario esotérico de la nueva ideología hispanista
de 1920 e influencia de la ariosofía. Además de esto
existen agregados y supresiones en casi todos los párrafos de la novela. Entre
los elementos agregados son notorios la utilización de mantras, aspectos
gnósticos (el “No fornicarás” de 1912 se agrega casi entero como capítulo 12 de
la novela, suprimiendo las menciones a la teosofía), elementos rosacruces (en
la versión alemana el santo grial está en el castillo de Chapultepec mientras
que en la española éste sería sólo una copia del original que se encuentra en
el Monasterio de Montserrat) y referencias “nórdicas” como “leones del norte,
que debían renacer allende los mares” y claras menciones posbélicas, como “así
como Jesucristo murió crucificado y resucitó, así como renacerá el pueblo
alemán después de haber sufrido el dolor de la crucifixión”. Entre los ataques
a la teosofía, por ejemplo, en la alemana dice que “perteneció a sociedades
espiritualistas y no le ofrecieron nada” agregando en la española “entre ellas
la sociedad teosófica” y “si los discípulos de Allan Kardec
se dejarán guiar por nosotros, lograrían mucho. Lograrían más que los teósofos,
pues estos están desencaminados en los últimos años”. En esta operación resulta
llamativa su apropiación del teósofo español Mario Roso de Luna que no está en
la versión alemana, el cual evidentemente le es útil para realzar el esoterismo
hispanoamericano.
[115] KAA,
CMO-64-D-01, “Os enigmas do Universo”, Revista
Ofensiva, 14 de noviembre de 1936
[116] Las
narrativas y lecturas esotéricas sobre el pasado prehispánico fueron
construidas por ocultistas como Krumm-Heller y Henri Girgois (este último con mayor erudición) en base a los
textos de los Cronistas de Indias aparecidos tras la independencia de México en
1821, siendo el colonialismo moderno uno de los aspectos centrales de la
conformación del esoterismo en Latinoamérica. Sobre estas implicaciones puede verse
mi ponencia: “Arnold Krumm-Heller
‘Huirarococha’ y Francisco Madero”.
[117] Ricardo
Pérez Montfort, “Un nacionalismo sin nación aparente.
(La fabricación de lo "típico" mexicano 1920-1950)”, Política y Cultura 12 (1999): 178.
[118] José
Vasconcelos, La raza cósmica. Misión de
la raza iberoamericana (Buenos Aires: Espasa-Calpe, 1948). La idea de que
la cábala y la masonería se habían originado en el Antiguo México comenzó a
surgir a mediados del siglo XIX a raíz de la oleada de descubrimientos
arqueológicos y la aparición de Códices y los Cronistas de Indias luego de la
Independencia. Los primeros en sostener estos discursos típicos de tipo Prisca Theologia
fueron arqueólogos amateurs norteamericanos, imbuidos bajo la ideología del
Destino Manifiesto norteamericano, los cuales proponían que eran los Estados
Unidos los encargados de proteger dicha sabiduría. R.
Tripp Evans, Romancing the Maya: Mexican Antiquity in the American
Imagination, 1820-1915 (Texas: University of Texas Press, 2004). Hacia 1915,
cuando las fronteras entre ambos países ya estuvieron más delineadas, algunos intelectuales
mexicanos, como José Vasconcelos o Diego Rivera, retomarron
estos discursos desde una postura nacionalista.
[119] “La
sexta subraza está apareciendo ya en los Estados
Unidos de América, y también en Australia. Y aunque la fecha de la aparición de
la séptima subraza tardará todavía siglos, hay
indicios de sus comienzos en América del Sur. Y he aquí por qué Sud América es
tan interesante para el teósofo: es la cuna de la séptima subraza
de la Raza Aria”. Curruppumullage Jinarajadasa, “Un
año de viaje por América Latina”, El Loto
Blanco, 1930, 6.
[120] Krumm-Heller, “Conferencias esotéricas”, 105.
[121] Tomás
Pérez Vejo, "Raza y construcción nacional. México, 1810-1910", en Raza
y política en Hispanoamérica, eds.
Tomás Pérez Viejo y Pablo Yankelevich
(México: Bonilla Artigas Editores, 2017), 61.
[122] Peryt Shou, Konzentration und
Wille, 6. Nicholas
Goodrick-Clarke, Black Sun: Aryan Cults, Esoteric
Nazism, and the Politics of Identity (New York-London: NYU Press, 2003),
136.