Revista de Ciencias Jurídicas N°160 (1-34) ENERO-ABRIL 2023
17
precedentes de intrusión en la esfera privada de las personas, potencialmente causando un
daño físico o psicológico, o permitiendo una influencia indebida en el comportamiento de
las personas.
36
En Estados Unidos, el presidente Barak Obama para el año 2013, llamó la atención
del
impacto

de

las

neurociencias

en

los

derechos

humanos.
37

Era

ya

observable

un
problema que se había desarrollado en la sociedad: evolución imparable del conocimiento
de los procesos mentales, pero sin una regulación apropiada. Parece la historia que nunca
deja
de

repetirse:

un

problema

en

la

sociedad

que

el

derecho

va

un

paso

atrás

en

su
regulación. Pero es que así funciona el derecho en muchas ocasiones, porque surge primero
la necesidad a nivel social de regulación, y posteriormente se discute y normativiza.
El avance de los estudios en la neurociencia se dio desde formas primitivas, pero su
revolución se dio en la década de 1990. No por nada se le llamó “la década del cerebro”.
Desde que Richard Canton, en 1878 descubrió la transmisión de señales eléctricas a través
del
cerebro

de

un

animal,

hasta

cuarenta

y

seis

años

después,

que

se

registró

la

primera
electroencefalografía (EEG) humana. Desde entonces, la revolución neurotecnológica ha
tenido lugar dentro y fuera de la clínica. En los años 1990, a veces llamada “la década del
cerebro”,
el

uso

de

técnicas

de

imágenes

para

estudios

neuroconductuales

aumentó
drásticamente.”
38
Actualmente,
se

habla

de

que,

del

estudio

del

cerebro

humano

puede

observar
diferencias
cerebrales

que

inciden

en

la

razón

por

la

cual

los

hombres

mayoritariamente
prefieren los carros deportivos y las mujeres no. “Un estudio estadounidense ha demostrado
que
la

resonancia

magnética

puede

utilizarse

para

deducir

las

opiniones

políticas

de

los
usuarios
identificando

diferencias

funcionales

entre

los

cerebros

de

demócratas

y
republicanos.”
39

De

lo

expuesto

en

el

párrafo

anterior,

surgen

preguntas

como:

¿cómo
garantizar que no habrá una mala manipulación de ese conocimiento entre las inclinaciones
entre republicanos y demócratas en futuras elecciones?
36
Ibid.
37

Presidential

Commission

for

the

Study

of

Bioethical

Issues,

"Gray

Matters", Integrative

Approaches

for
Neuroscience, Ethics and Society 1 (2014).
38
Judy Illes, "Neuroethics in a New Era of Neuroimaging", Chronobiology in Psychiatry 9, n.º 24 (octubre de
2003), https://doi.org/10.31887/dcns.2007.9.3/pschulz.
39

Darren

Schreiber

et

al.,

"Red

Brain,

Blue

Brain:

Evaluative

Processes

Differ

in

Democrats

and
Republicans", PLoS ONE 8, n.º 2 (febrero de 2013): XXXX, https://doi.org/10.1371/journal.pone.0052970.